Los vecinos de la zona del Tarajal y de la barriada Príncipe
Felipe no entienden muy bien para que servirá la cancela que
ayer quedó medio instalada en el hueco de la escalera que
une la zona de la frontera con el polígono del Tarajal.
Como ha venido publicando este periódico en días atrás, esta
zona está viviendo unos momentos de tensión graves, sobre
todo desde que los padres y madres de los alumnos del
colegio público Príncipe Felipe, hartos de pedir una
solución al problema que tienen los escolares con el
trasiego de porteadores, decidieran el miércoles de la
pasada semana iniciar una campaña de protestas, que conllevó
en la primera jornada el corte de la vía en la que se
encuentra el centro escolar y, posteriormente, dos cortes de
tráfico en la carretera nueva, la que da acceso a la
frontera con Marruecos.
Es cierto que padres y vecinos han realizado todo tipo de
movilizaciones en pos de buscar solución al dilema,
presentándose tanto en la Delegación del Gobierno como en el
Palacio de la Asamblea para ser recibidos por alguna
autoridad que pusiera un poco de luz al desaguisado en el
que se ha convertido el problema de la zona fronteriza.
Las autoridades siempre han mantenido que las dos
Administraciones trabajaban para dar con la solución al
problema, pero más que acabar con el lo que hicieron fue
agravarlo, sobre todo cuando el sábado pasado se decidió
demoler un tramo de la escalera de la discordia, como
algunos ya la llaman en la barriada.
El miércoles sucedió algo que se vaticinaba. Una porteadora
cayó desde tres metros al hueco de la escalera, sufriendo
fractura de cadera, fémur y luxación de codo.
A renglón seguido, el presidente, que ve más problemas de
los que existen, hablaba de dos cuando en realidad lo único
que sucede es que el existente desde primera hora no se ha
soluciona, todo lo contrario, con las actuaciones llevadas a
cabo se ha empeorado, salía diciendo que los padres llevaban
razón y ayer los vecinos se encuentran con una cancela donde
antes se construyó un muro que hubo de ser derribado ante
las protestas de todo el vecindario.
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