La Ciudad Autónoma de Ceuta y la Delegación del Gobierno se
unieron ayer en un acto institucional para conmemorar el Día
Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la
Mujer. El acto, presentado por el compañero de Radio Ceuta
‘Cadena Ser’, Antonio Martín, dio comienzo con la lectura de
algunos de los nombres de las 45 víctimas por violencia de
género que se han producido en lo que va de año, recibiendo
el aplauso de los asistentes en un caluroso homenaje y
reconocimiento.
El presidente de la Ciudad Autónoma, Juan Vivas, fue el
encargado de hacer entrega del reconocimiento al servicio
112, recogiendo el mismo Javier Romaguera, director del
servicio, quien agradeció el reconocimiento y felicitó a la
plantilla en su implicación en la lucha contra la violencia
de género. Finalmente, Romaguera abogó por la prevención de
la violencia de género, especialmente en los niños y
colegios.
A continuación fue la consejera de Educación, Cultura y
Mujer, Mabel Deu quien hizo entrega de una distinción
honorífica al traductor Hamed Abdel-La Ali, quien se dirigió
a los presentes para resaltar su orgullo y satisfacción por
recibir dicha mención, la cual le reforzará a seguir
ayudando a las víctimas. Abdel-La hizo referencia a un
episodio vivido durante su servicio militar y lanzó un
mensaje cargado de crítica a la segregación social, la cual
“mina la multiculturalidad de Ceuta”. Afirmó, sensiblemente
emocionado, sentirse orgulloso de pertenecer a ese gran
colectivo que lucha a diario y de forma altruista contra la
violencia de género e hizo una súplica para que “todos nos
unamos en la lucha contra esta lacra social”.
Posteriormente fue la Delegación del Gobierno quien hizo
entrega de los reconocimientos al Servicio de Atención a la
Familia (SAF) del Cuerpo Nacional de Policía y al Equipo de
Mujeres y Menores de la Guardia Civil (EMUME).
Tras la entrega de los galardones, el delegado del Gobierno
en Ceuta, Francisco Antonio González Pérez, se dirigió a los
presentes, resaltando que primera idea que le venía a la
cabeza era “la rabia y el disgusto al tener que,
desgraciadamente, luchar con una lacra que nos afecta a
todos”. González Pérez destacó que el Gobierno actualizará
la ley para reforzar las medidas necesarias en la ayuda a
combatir la violencia de género y quiso mandar un mensaje de
esperanza y ánimo a las víctimas, para que rompan ese
silencio que ampara a los maltratadores y les recuerda que
no están solas.
Igualmente destacó que en esta situación el apoyo de los
seres queridos y de los profesionales logrará romper esas
cadenas y que las víctimas se sientan queridas.
El acto concluyó con la entrega del premio María de Eza 2013
a Manuela Gómez. Antes de hacer entrega del galardón, se
proyectaron unas imágenes sobre la vida de Manuela, natural
de Melilla, aunque caballa de adopción.
Vivas fue el encargado de entregar este reconocimiento a
Manuela Gómez bajo un sonoro y prolongado aplauso.
Gómez se mostró emocionada y nerviosa, y durante su
intervención manifestó que tomaba el galardón en
representación de todas las mujeres que si merecen este
premio. “Yo soy una representación de todos mis compañeros”,
manifestaba mientras agradecía a todos los presentes su
apoyo y recordaba que ella no ha luchado sola, a la vez que
animaba a los asistentes a “pelear por la igualdad”.
Igualmente, durante su intervención alertó que el miedo que
ahora tiene es que “la violencia de género ha aumentado
entre los jóvenes”, destacando que algo no se está haciendo
bien, de ahí que instara a la sociedad a poner todos los
medios posibles para cambiar esta tendencia.
Por último, Manuela Gómez destacó que el premio recibido lo
tiene que compartir con muchas personas y destacó la
importancia del hombre en esta lucha contra la violencia de
género.
El acto lo clausuró el presidente Vivas quien destacó la
importancia del mismo para hacer una convocatoria en
beneficio de la unidad en contra esta violencia de género,
asegurando que “merece la pena reunirse para apoyar a
mujeres de la categoría de Manuel Gómez”.
Vivas aseguró compartir lo de “juntos podemos, para levantar
un muro donde no quepa la intransigencia y la violencia
contra la mujer”, indicando que “no caben medias tintas, ni
ambigüedades, no se puede mirar para otra parte cuando
existen situaciones de maltrato” y mientras aseguraba que
“la hipocresía en este asunto constituye una verdadera
perversión e indecencia”.
Finalmente, agradeció a todos los galardonados el encomiable
trabajo que realizan y por el que muchas mujeres se han
sentido apoyadas.
Antes de concluir el acto, Vivas hizo mención a los 25 años
Centro Asesor de la Mujer, y a la evolución que ha sufrido,
destacando que el espíritu de este organismo permanece
inalterable gracias a los profesionales del centro y a las
mujeres que allí acuden, siendo eso los pilares del CAM.
Por último y dirigiéndose a Manuela Gómez, aseguró que “el
premio no es tu mejor título, creo que tu mejor título es
que eres una excelente persona y tu principal patrimonio es
el afecto y el reconocimiento de todos los que hemos tenido
la suerte de conocerte”.
|