La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez,
destaca en esta entrevista la importancia del convenio de
colaboración suscrito con el Notariado, que permitirá la
investigación de fraudes como los que se esconden tras las
denominadas “empresas ficticias”. En otro orden de cosas, la
titular de Empleo se reafirma en que la reforma laboral ha
cumplido sus objetivos y asegura a los cotizantes presentes
y futuros que el sistema les garantizará sus pensiones.
“Estamos viendo indicadores que apuntan a que estamos
consiguiendo frenar la destrucción de empleo. Estamos
conociendo datos que no habíamos registrado con
anterioridad.”
Pregunta.- –Según el último barómetro del CIS el paro es el
principal problema que existe en España. ¿Cuál es su
valoración del trabajo realizado desde el comienzo de la
legislatura?
Respuesta.- En un ejercicio de responsabilidad y realismo el
Gobierno presentó el pasado 26 de abril un cuadro
macroeconómico que reflejaba la difícil situación económica
a la que había que enfrentarse, un escenario realista que el
Gobierno nunca ha negado. Había que adoptar decisiones
valientes aún a costa de soportar una fuerte contestación
social.
Pero con los datos que vamos confirmando cada día
comprobamos que la política económica del Gobierno está
sentando las bases para un crecimiento más sano y sostenido,
con mayor capacidad de generar empleo. Las reformas y
medidas que hemos tomado en los primeros meses de
legislatura eran una condición imprescindible para corregir
los graves desequilibrios que había acumulado la economía
española. Para hacernos una idea, España había destruido
entre el principio de 2008 y el final de 2011 cuatro veces
más empleo que Italia, siete más que Reino Unido y 13 veces
más que Francia. El desempleo de larga duración era cinco
veces y media superior al del inicio de la crisis y la tasa
de paro se multiplicó por 2,4 alcanzando niveles
intolerables, especialmente el desempleo juvenil.
Estamos viendo indicadores que apuntan a que estamos
consiguiendo frenar la destrucción de empleo. El número de
parados en el mes de agosto de 2013 ha disminuido por
primera vez desde el año 2000, el mejor comportamiento del
paro que se ha registrado en un mes de agosto desde el año
2000. Sin duda un buen dato que nos anima a seguir
trabajando en el objetivo fundamental de crear empleo.
P.-¿Cree que se han sentado las bases para un descenso
sostenido y progresivo del desempleo?
R.-A pesar de que la recesión todavía sigue siendo intensa,
las cifras de paro y de contratación de los últimos meses
muestran una tendencia positiva. En términos interanuales,
comprobamos que el paro cada vez crece menos y la
contratación se mantiene activa. Se ha conseguido llegar al
final del verano con un saldo neto de caída del paro en lo
que va de año que no se registraba desde el año 1999 y con
un ritmo de contratación alentador dado el contexto de
dificultad y prolongación de la crisis. Creemos que es un
síntoma de que el mercado de trabajo está recuperando sus
signos vitales y nuestro objetivo ahora es que no se quede
en una mera mejora coyuntural dictada por la estacionalidad,
sino que se asiente y se extienda en el tiempo y responda
cuando se reactive la economía.
P.-Usted ha aludido a la existencia de “muchos servicios
de estudios nacionales y extranjeros que dicen que España
sale en 2013 de la crisis, quizás incluso antes de que
llegue el final del año”. ¿Podría conectarse este pronóstico
con el fin de la destrucción de empleo en nuestro país?
R.-Estamos conociendo datos que no habíamos registrado con
anterioridad. Para que se haga una idea, el desempleo
registrado se ha situado en agosto en 4.870.215, lo que
supone 13.700 parados menos que en julio en términos
desestacionalizados. Además, el paro registrado desciende
por sexto mes consecutivo. Se trata de la primera vez que
esto sucede desde 2006, año en el que el PIB crecía al 4,1
por ciento. De hecho, en los últimos seis meses la caída del
desempleo ha sido de más de 340.000 personas.
La reforma ha ayudado primero a detener la velocidad de la
caída cuando el PIB aceleraba su contracción, algo nunca
visto en España. Y luego a moderarla conforme se recupera el
crecimiento econó mico. Esperamos que la economía empiece a
crear empleo desde tasas del 1-1,2 por ciento de crecimiento
del PIB, cuando antes necesitábamos crecer al dos por
ciento. Y todo ello lo está logrando la economía española en
medio de un profundo proceso de desapalancamiento. Estamos
corrigiendo hoy los desequilibrios que deberían haberse
comenzado a corregir hace mucho tiempo. Y no es fácil, ni
rápido, ni cómodo. Pero se puede lograr a base de esfuerzo
colectivo, a base de realismo.
España está experimentando una recuperación económica a una
velocidad que nadie pronosticó, ni siquiera los organismos
internacionales. Funcas, por ejemplo, ha revisado
recientemente sus perspectivas de crecimiento para 2013 y
2014. Pronto le seguirán otros. Esto nos anima a seguir
avanzando con las reformas estructurales para hacer frente
al principal reto del actual contexto económico, que es
fortalecer la recuperación económica, crecer y volver a
crear empleo.
P.-Transcurrido más de un año y medio de vigencia de la
reforma del mercado laboral, ¿considera que está dando sus
frutos?
R.-Se puede afirmar que la reforma ha cumplido sus
objetivos. Pese a la acumulación de siete trimestres en
recesión, la aceleración de la caída del crédito, y la
reducción de casi 400.000 empleos en el sector público, la
reforma ha conseguido contener el incremento de paro,
detener la reducción de empleo, reducir la dualidad del
mercado laboral y mejorar su flexibilidad, permitiendo a las
empresas adaptarse al contexto económico más fácilmente y
haciendo nuestra economía más competitiva.
Desde la reforma laboral, el crecimiento interanual del
desempleo ha pasado del 17,8 por ciento al cinco por ciento.
También ha evitado la destrucción de hasta 225.000 puestos
de trabajo mediante su contribución a ralentizar la
destrucción de empleo en un contexto muy difícil de segunda
fase recesiva de la crisis. Por otro lado, ha contribuido a
cambiar la dinámica del mercado de trabajo de forma que
permitirá la creación de empleo a partir de un crecimiento
económico más moderado, de entre el uno y 1,2 por ciento del
PIB.
Ha tenido también unos efectos muy positivos sobre la
negociación colectiva, a la que ha dotado de mayor
dinamismo, de tal manera que se incrementen las medidas
alternativas consensuadas entre empresa y trabajadores, y el
despido sea el ultimo recurso frente a otras medidas como
las suspensiones temporales de contrato o las reducciones de
jornada. Es importante destacar el alto grado de consensos
que se están alcanzando en este tipo de medidas, cercano al
90 por ciento.
Además ha contribuido, a través del Contrato de Apoyo a
Emprendedores, al acceso al empleo indefinido estable. En el
marco general de una contratación, muy afectada por la
incertidumbre y la prolongación de la recesión, este
contrato ha incorporado a casi 140.000 personas al mercado
de trabajo, el 40 por ciento de ellos jóvenes. Pese a la
finalización del período de prueba pasado un año, estas
contrataciones se han mostrado estables, con un
mantenimiento en el empleo del 60 por ciento al cabo de un
año.
P.-Otro de los temas que más preocupan a millones de
españoles es el relativo a las pensiones. ¿Cómo afectará a
los ciudadanos el llamado “factor de sostenibilidad”?
R.-Nuestro modelo de pensiones está basado en un sistema
público que cada mes llega a más de nueve millones de
hogares. Su compromiso es asegurar a todas las generaciones
una pensión garantizando un trato equitativo; de forma que
los esfuerzos similares de aportación obtengan retornos
similares de la prestación a lo largo del tiempo. Para
cumplir con este pacto entre generaciones es necesaria una
Seguridad Social económicamente fuerte, capaz de responder a
sus crecientes obligaciones de gasto. El número de pensiones
alcanzará los 15 millones en 2050, cuando hoy somos 9
millones. El gasto en pensiones ha crecido un 108 por ciento
desde el año 2000. Con este escenario es necesario tomar
medidas responsables que permitan que el sistema de
pensiones sea sostenible en el medio y en el largo plazo. El
factor de sostenibilidad vincula las pensiones a la
evolución demográfica de nuestro país y al incremento de la
esperanza de vida. Un segundo componente es el Índice de
Revalorización de las Pensiones que depende de los ingresos
y gastos del sistema, es decir, de si hay déficit o
superávit en el sistema. Este índice garantiza que las
pensiones no bajarán ni se congelarán nunca puesto que como
mínimo crecerán un 0,25 por ciento al año.
Las personas que hoy están cotizando pueden tener la
certeza, como deben tenerla también los futuros cotizantes,
que el sistema les garantizará sus pensiones,
independientemente de las circunstancias económicas o
demográficas que tenga en cada momento el país.
P.-Se plantea que este factor de sostenibilidad esté
vinculado a la esperanza de vida en cada momento…
R.-La reforma que hemos planteado se hace para preservar un
modelo público de pensiones, de reparto, contributivo, de
prestación definida y solidaridad entre generaciones. Se
mantienen los principios esenciales de la seguridad social:
Un modelo de reparto, prestación definida, contributivo y de
solidaridad generacional. Al mismo tiempo, se da continuidad
al pacto intergeneracional básico en el sistema de
pensiones. La incorporación del Factor de Sostenibilidad
asegura que personas que han vivido en épocas diferentes
recibirán pensiones equivalentes.
Se garantiza la revalorización de todas las pensiones de
acuerdo a indicadores objetivos y fiables, tales como número
de cotizantes, ingresos y gastos, etcétera, frente a la
indexación al IPC, en desuso en la mayoría de la UE y
siguiendo las recomendaciones del Pacto de Toledo y del CES
en su dictamen de la Ley 27/2011. El sistema asegura una
revalorización, puesto que el “suelo” que incorpora el
Índice de Revalorización de las Pensiones supone que las
pensiones subirán siempre y lo harán en función de la
situación económica. Por tanto, la congelación queda
descartada: al margen de que la coyuntura económica sea
favorable o desfavorable porque las pensiones se
actualizarán siempre con al menos un 0,25 por ciento anual.
P.-Según datos de su Ministerio, la Estrategia de
Emprendimiento y Empleo Joven está funcionando. ¿Cuáles son
sus pilares?
R.-Se trata de una iniciativa que articula cien medidas para
mejorar la empleabilidad de los jóvenes, estimular la
contratación y favorecer el emprendimiento. Ya se han puesto
en marcha el 38 por ciento de las medidas que incluye la
EEEJ, el 73 por ciento en el caso de las medidas de choque.
A día de hoy, son más de 81.000 los jóvenes que se han
beneficiado de las diferentes medidas de estrategia, más de
450 cada día y han encontrado una oportunidad de empleo,
bien por cuenta propia o bien por cuenta ajena.
Miles de jóvenes tienen hoy oportunidades que antes no
tenían y esto no es confundir deseos con realidad, es el
fruto de un trabajo, serio, intenso y de muchos meses para
abordar esta situación y una de las coyunturas más difíciles
que ha atravesado nuestra economía. Aunque insisto en que
nos queda mucho por hacer.
P.-Recientemente, firmaron con los notarios un convenio
de colaboración por el cual estos facilitarán a la
Inspección de Trabajo y de Seguridad Social la información
que obre en su poder que pueda contribuir a prevenir y
corregir el empleo irregular y el fraude a la seguridad
social. ¿Cómo valora este acuerdo?
R.-Este acuerdo supone un paso trascendental en la
cooperación institucional que permitirá a la Inspección de
Trabajo acceder de modo rápido y eficaz al contenido de
todos los documentos que reflejan los actos jurídicos en los
que hayan intervenido los notarios, y que se han incorporado
al Índice Único Notarial, como instrumento eficaz para la
lucha contra el fraude.
Así se obtendrá información fundamental para la función
inspectora, como la referente a la composición de órganos de
administración de sociedades; la intervención en compraventa
de acciones y participaciones sociales; la constitución de
hipotecas, apoderamientos, y, en general, para determinar la
efectiva titularidad y gestión de las empresas.
De esta manera, se facilitará la investigación de supuestos
complejos de fraude, tales como los constituidos por las
denominadas “empresas ficticias”, y se contará con un
instrumento de indudable utilidad para determinar la
existencia de casos de derivación de responsabilidad por
deudas a la Seguridad Social cuando se produzcan sucesiones
empresariales, o para declarar la existencia de grupos de
empresas no transparentes.
P.-¿En qué otras medidas trabaja su Ministerio para
erradicar estos dos graves problemas?
R.-En abril de 2012 aprobamos el Plan de lucha contra el
empleo irregular y el fraude a la Seguridad Social, que
contenía modificaciones normativas, incluso del código
Penal, medidas de mejora de la colaboración entre todos los
agentes implicados en la lucha contra el fraude, y mejoras
de los recursos a disposición de la lucha contra el fraude.
El Plan está dando resultado. Está permitiendo aflorar
empleo sumergido (130.512 empleos desde el lanzamiento del
Plan), desmantelar tramas organizadas de empleos ficticios
(casi 65.000 altas ficticias identificadas, un 146,3 por
ciento más de infracciones identificadas en el primer
semestre de 2013), y retirar prestaciones a quienes las
obtenían ilegalmente. Desde el inicio de la legislatura se
han ahorrado 3.161 millones de euros. Dinero que es de
todos, del que nunca debe prescindir nuestro sistema de
seguridad social, y menos cuando está siendo preciso el uso
de recursos del Fondo de Reserva, y del que algunos se
apropiaban indebidamente.
|