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Buenos días, Ceuta.
He retomado las cuestiones de actividades físicas personales
como si tuviera 19 años.
Hacía dieciséis años que no me dedicaba concienzudamente,
por diversas razones, a los ejercicios físicos.
Como me gusta mucho la natación, recuerdos de aquellos
tiempos en el Caballa y con Serrais como entrenador, me
apunté a la piscina olímpica “David Meca”, del complejo
polideportivo Elola de Fuengirola, con resultado
catastrófico.
El primer día me dieron calambres en ambas piernas que me
dejaron en estado casi catatónico.
Tan catatónico me han dejado como pudieran dejarme las
noticias más escabrosas.
Lo de la valla de Melilla ya es cachondeo maquiavélico.
Colocar concertinas en la misma, acarrea una serie de
protestas, con razones más o menos lógicas de aquellos
colectivos asociados pendientes de terceros que de los
propios paisanos.
Los ‘pinchos morunos’ incluidos en las mencionadas
concertinas, que por otro lado corresponde también a una
especie de acordeón ‘enano’, también están proyectados para
la valla de Ceuta, creo.
Las lesiones que ocasionarán a quienes traten de saltar la
valla serían tremendas, supuestamente, y si cortan a alguno,
más que el corte será la subsiguiente infección lo que
juegue con la vida de ese alguno.
Alcanzar la libertad tiene algunos límites ¿no?
Otro ‘pincho moruno’ es el que ha colocado los del PP a los
ciudadanos, en sus declaraciones ante el juez de turno, en
respuesta a los delitos que se les imputan, supuestamente.
Me parece totalmente increíble que afirmen rotundamente que
firmaron documentos y recibos sin contrapartida alguna.
Si algún juez admite esas cuestiones como atenuantes… una de
dos: o son tontos o son cómplices, no hay vuelta de hoja.
Que uno de los implicados, del PP por supuesto, declare que
sí firmó un recibo por importe de 200.000 euros y que no
recibió ni uno, alegando que lo firmó por imposición de su
jefe… ha resultado ser uno de los mejores chistes que he
oído en mi vida.
Todavía me dura la risa.
Estas paridas peperas son tan estrafalarias que no dan
ocasión a tomarse en serio las declaraciones de los propios
peperos, por muy alto que lleguen no dejan de ser
representantes de un circo mediático.
Aunque pasemos malos ratos por los chistes malísimos que
hacen, podemos divertirnos como queramos.
Tanto como en la presentación de las memorias de José Mª
Aznar, ex presidente del Gobierno de este país.
He leído algunos párrafos y ahí observo que demuestran que
tiene problemas de una gran prepotencia y soberbia.
Sigue con su megalomanía y su tinte autoritario, ratificado
en que ha tomado nota de la no asistencia de miembros del
Gobierno actual, que representa un claro mensaje de ruptura
que deja, a Aznar, en una cuneta imaginaria.
Si alguien quiere ponerse con cara avinagrada y/o de mala
leche, lean esas memorias. Al primer momento no sabía si
llorar o morirme de risa…
En fin, la vida sigue y yo también.
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OPINIÓN / LAS NOTAS DEL QUIM
