Caballas votó en contra del proyecto de presupuestos que
presentó el Gobierno al entender que este sólo viene a
“limpiar la casa y recoger los platos rotos” de épocas
anteriores en las que se gastaba y “todo daba igual”. “Estos
presupuestos son la resaca de la orgía de gasto que se ha
vivido”, aseguró Juan Luis Aróstegui, que actúo como
portavoz del grupo en el debate de ayer. Entre las críticas
más destacadas de los localistas figura la falta de un plan
de vivienda o la escasez de ayudas a los más necesitados.
Además, Caballa reclama una política de empleo más eficaz y
una de inversión que contemple a las barriadas.
Todo sigue igual. Este es el resumen que hacía ayer en la
Asamblea Juan Luis Aróstegui, como portavoz de Caballas,
sobre la política presupuestaria del Gobierno de Juan Vivas.
Para el diputado, 290 millones de euros después del debate
de presupuestos del año anterior, los ciudadanos “viven
peor” y no se ha mejorado nada. “El Gobierno ha gastado 290
millones, se supone que en una dirección correcta, pero no
hay menos paro, no hay menos pobreza y no hay mejores
resultados en servicios públicos fundamentales como Sanidad,
Educación o Vivienda” reprochaba el localista para
cuestionar en qué se ha gastado el Ejecutivo el dinero.
Para Aróstegui la explicación a estos presupuestos es que la
ciudad debe pagar ahora lo que se gastó en una época en la
que “todo daba igual”. ”Estos presupuestos son la resaca de
la orgía del gasto que se ha vivido”, criticó el diputado
para quien ahora el Gobierno está intentando “limpiar la
casa y recoger los platos rotos”. No obstante, Aróstegui
dejó en evidencia que “ahora quieren hacer lo mismo con
menos dinero”. “Antes lo gastaban injustamente y estarían
cometiendo un delito”, acusó el localista para quien el
Gobierno está intentando “que no se termine de descontrolar
la institución” a base de créditos. Y para el diputado, tras
la calificación de refinanciación se quiere esconder “una
manera cursi de pagar después, como hacen los morosos, lo
que no pueden pagar”.
Pagar proyectos ajenos
Esta gestión ha provocado que la Ciudad tengan que destinar
100.000 euros diarios a pagar préstamos e intereses, y así
lo destacó Aróstegui, que cuestionó si deuda viva de la
ciudad está justificada. El portavoz de Caballas recordó que
la deuda en si no es mala ni buena, sino que depende de lo
que rentabilice. Y para Caballas, la deuda de 26,6 millones
del Campus Universitario sólo ha servido para “hacerle un
campus nuevo a la Universidad de Granada, pero sin ampliar
la oferta universitaria”.
“No se puede entender que entrampemos a las futuras
generaciones para pagar lo que no ha querido pagar ni el
Ministerio de Educación ni la Universidad de Granada”,
criticó Aróstegui.
El portavoz del grupo Caballas aseguró que el presupuesto ha
ido reduciendo “su capacidad de intervención en los
problemas de la ciudad para pagar aquello que se gastó
indebidamente”. Además, acusó al Gobierno de mirar para otro
lado para no percartarse de la realidad de los que lo pasan
mal. Para los localistas el presupuesto es “estático,
inamovible y sirve a intereses espurios”. Aróstegui no se
escondió a la hora de acusar al Ejecutivo de tener intereses
contrapuestos al beneficio de la ciudadanía.
Sobre el capítulo de gastos. Caballas centró sus críticas en
dos aspectos: las consejerías y las subvenciones. Sobre las
primeras, Aróstegui aseguró que están regidas por una
política de “irracionalidad” y que tienen “escasa eficiencia
en el gasto”. El localista comparó las consejerías con
“reinos de taifas” en los que cada responsable hace “lo que
le da la gana abusando de la capacidad de contratación
directa”.
Manipulación de fondos
En segundo lugar, el localista se refirió a la política de
subvenciones del Ejecutivo como la herramienta que utiliza
el PP para comprar votos. Para Caballas, el criterio para
otorgar las ayudas a asociaciones está marcado desde
Teniente Arrabal y Aróstegui incluso llegó a acusar al
Gobierno de manipulación de fondos públicos. Además,
criticaron que una fundación que se acaba de crear, como el
caso de la Fundación Alberto Gallardo, sea la que más ayuda
se vaya a llevar (266.000 euros). Una queja que Caballas
compartió los compañeros de la bancada de la oposición.
No obstante, para Caballas uno de los problemas más graves
es “la perversión de las prioridades”. Así Aróstegui se
refirió al problema de la vivienda como uno de los más
importantes y que, sin embargo, no tiene un sitio en este
presupuesto. “Casi el 50% de lo que destinan a políticas
sociales es para alojamiento alternativo, pero tienen cero
acciones para construcción de vivienda”, reprochó el
diputado para advertir que con esta política se está
condenando a las generaciones futuras a “malvivir”.
Sin Plan de Vivienda
Para Caballas, esta ciudad necesita un plan de construcción
de vivienda y así lo reclamaron ayer. Aróstegui señaló que
está podrá ser lenta y tener recursos limitados, pero
insistió en que “no puede dejar de ser una prioridad”.
Mientras, sobre la rehabilitación que se va a llevar a cabo
en tres barriadas, el localista calificó de “extraña la
elección de las barriadas” y aseguró que esta responde a
intereses electorales.
Además, el diputado puntualizó que la Ciudad no asumirá todo
el coste de la rehabilitación, ya que parte lo tienen que
sufragar los vecinos y acusó al Gobierno de esconder esta
parte de cara a la galería. “esto no es más que una campaña
electoral que tiene como objeto colocar cartelones grandes,
aunque no se lleve a cabo la rehabilitación”, afirmó.
A la política de empleo del Ejecutivo de Vivas, Aróstegui la
calificó de sangrante. “Ustedes han mentido”, acusó para
explicar que aunque se han incluido 2,3 millones para empleo
joven no se ponen en marcha medidas efectivas para
solucionar el problema del paro y formar a los jóvenes. Y es
que, en este Plan de Empleo Juvenil se va a destinar a los
beneficiarios sólo a limpiar basura.
Desde Caballas lamentan que no haya inversión para “permitir
la regeneración del sistema productivo”. “No hay ni un solo
euro para ni una medida, ni para los problemas con los
barcos, ni para el desarrollo industrial, ni destinado a las
nuevas tecnologías...”.
¿Personas o caballos?
Por último, Aróstegui quiso destacar que es “imprescindible”
invertir en las personas e instó al Gobierno a llevarlo a la
práctica de forma real y no con una partida en la que hay
cifras “sumadas erróneamente” como el Plan de Empleo
Juvenil, según alegó. Así, el diputado aseguró que la
partida final de ayudas sociales es de 3,3 millones y no de
7,2 millones, y calificó de “infamia” que la Ciudad se haya
gastado en ayuda para alimentar a las familias 700.000 euros
y 300.000 para alimentar caballos.
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