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Buenos días, Ceuta.
Tras una larga pausa vuelvo a la ventana con mis Notas.
No tengo la potencia de otras veces, lo confieso, para
escribir artículos de opinión que pueda interesar a alguien,
a alguien por lo menos.
Para poder seguir la pauta, que hace años inicié,
necesitaría todo un ejército de espías que me vayan
señalando el camino de mis escritos.
No seguí el consejo de Sun Tzu y por ello no conseguí
utilizar a los más inteligentes espías y así estar seguro de
conseguir llamar la atención. Pocos son los que me ayudan,
con las noticias de interés, que no sean los escritos de
otros periodistas o autores.
Lo que ocurre en nuestro país, en política principalmente,
suele ser incidencias someras y de poco poder llamativo, que
por otro lado son tratadas por los profesionales de la
información, versión crítica dura.
Y por otros profesionales del camelo, faltaba más.
Si tuviera el poder de filtrar informaciones clasificadas,
como el que tiene el ex analista de la CIA y de la NSA
Edward Snowden, ya estaría seguramente detrás de una lápida.
No solo nuestro país está controlado electrónicamente por
los norteamericanos, o por los alemanes, sino que cada
ciudadano español que posea una terminal está constantemente
vigilado.
Los propios ciudadanos son los que suministran las noticias
‘claves’ de la situación cotidiana a través de los whatssaps,
facebooks, twuiters, etc., que existen, sobre todo los
celulares (móviles), a través de las grandes centrales
telefónicas.
Si no fuera por el ex analista Snowden, hoy en día
seguiríamos viviendo con las musarañas.
No creamos, sencillamente, que los norteamericanos son los
únicos que nos espían a todas horas.
Así se deduce del acuerdo entra la Merkel y el Obama: no
espiarnos de mutuo acuerdo… y a los demás, ¿qué?
De todas formas os aseguro que mis anteriores escritos en
los que criticaba a los políticos y sus actos, nunca he
tenido espías a mi favor, ni siquiera podría pagarles sus
servicios, y todo ello proviene de simple elucubraciones a
través de las noticias de prensa y de los medios de
información.
Sin embargo, estoy un poco orgulloso de que la mayoría de
mis comentarios hayan estado, más o menos, acertados.
Los hechos posteriores a mis escritos así lo confirmaron.
Eso me ofrece una oportunidad de seguir haciendo lo que
llevo haciendo.
Seguiré con mis opiniones, mis críticas, mis pareceres, en
fin lo que me dicten las células grises de mi ya viejo disco
duro, que sigue funcionando sin altibajos y sin virus
corrosivos.
Cambiando de tema, no me extraña que el ex juez Baltasar
Garzón se haya ofrecido al PSOE para derrotar a la derecha.
Los socialistas tienen, la próxima semana, que definir su
nuevo camino a través de una conferencia política y cuentan
con el apoyo de personas de izquierda de cierto valor
intelectual que proclaman: “Es imprescindible y urgente
revertir la destrucción de derechos que el PP está
ejecutando…”. Estoy completamente de acuerdo.
En fín, la vida sigue y yo también.
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OPINIÓN / LAS NOTAS DEL QUIM
