El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, obtuvo ayer el
respaldo de los líderes europeos a su plan de acción
conjunta ante la inmigración ilegal en el marco de la
Consejo Europeo que se celebró en Bruselas. El objetivo de
esta iniciativa es evitar tragedias como la ocurrida en
aguas próximas a la isla italiana de Lampedusa, en las que
murieron casi 400 personas. Rajoy expresó, en una
conferencia de prensa, su satisfacción por la acogida a su
propuesta en materia de inmigración ilegal.
El líder el Ejecutivo trasladó la pasada semana al
presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, varias
propuestas que han servido de base al acuerdo de los
veintiocho en torno a este asunto. Aunque las medidas
concretas no se adoptarán hasta junio, Rajoy dijo que el
Consejo Europeo ha reaccionado con celeridad ante el
naufragio de Lampedusa y ha destacado el papel activo de
España en esta cuestión debido a la experiencia que tiene
también en ese asunto al ser receptora de flujos de
inmigración tanto en Ceuta como en Melilla.
Rajoy destacó que la cumbre europea haya constatado que
hacer frente a la inmigración ilegal es una cuestión que
afecta a la UE en su conjunto, y que la acción debe regirse
por los principios de prevención, protección y solidaridad.
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