Una posible crisis epiléptica pudo ser la causa del
percance que sufrió una persona de mediana edad que estrelló
su vehículo contra la mediana en la Avenida Juan Pablo II,
precisando la asistencia de la Unidad Móvil de Emergencias
del 061, que fue requerida al encontrarse un hombre con
convulsiones y sangre en la lengua.
Los síntomas que presentaba el paciente, según información a
la que ha tenido acceso este periódico, eran propias de un
ataque epiléptico o cualquier tipo de crisis convulsiva,
aunque el diagnóstico que parecía presentar era el del
primer caso, si bien el afectado dijo que nunca había tenido
un síntoma de esta naturaleza, por lo que los servicios de
asistencia médica que le atendieron, consideraron que
“debutaba” con esta patología, por lo que no se encontraba
bajo medicación alguna para esta sintomatología.
Las convulsiones que sufría, su aspecto crítico, la
desorientado que mostraba al ser atendido y su aspecto
obnubilado, indujeron a pensar que se encontraba en plena
crisis epiléptica al ser socorrido.
Los sanitarios le abrieron una vía periférica con medicación
intravenosa para estabilizarlo en el lugar en el que se
había tumbado el propio paciente, que había salido del
vehículo que conducía, sin poder determinarse si lo hizo él
sólo o con ayuda de alguien, después de estrellar su coche
contra la mediana en la Avenida Juan Pablo II, aunque no
hubo consecuencias para otros conductores. No presentaba
lesión física en apariencia y, una vez estabilizado, fue
trasladado al hospital universitario de Ceuta, donde
permaneció en observación.
Esta incidencia se produjo entre las dos y media y las tres
menos cuarto de la tarde. Hasta el lugar se desplazaron en
una ambulancia un médico, un enfermero y dos técnicos en
emergencias, que atendieron sobre la misma acera al enfermo
al que encontraron a su llegada ya tumbado.
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