PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
  

 

 

OPINIÓN - VIERNES, 11 DE OCTUBRE DE 2013

 

OPINIÓN / MIS COSAS

Mis cosas
 


ADE
opinion
@elpueblodeceuta.com
 

Aun tal Robert, le dio un día por decir la frase: “Ni quito, ni pongo rey, ni defiendo a mi señor”. No sabía, cuando la dijo, el efecto que iría produciendo a lo largo de los años.

Uno, al que le gustan los refranes, los fandangos y las algunas de las frases hechas como las del tal Robert, se aprovecha de ello para decir que ni quito, ni pongo rey, por la sencilla razón de quién soy yo para realizar semejante cosa. Y en cuanto a lo “ni ayudo a mí señor”. Esa parte la tengo mucho más clara, ya que no he tenido jamás señor alguno.

De ahí, de ese carecer de señor alguno, es por lo que no voy a defender al Delegado del Gobierno, Francisco Antonio González, pero si voy a darle la razón, toda ella, en la defensa que como representante del Gobierno, hace sobre la legalidad vigente que todos tenemos que cumplir negándose, como no podría ser de otra forma, a legalizar algo que es ilegal aunque, aprobar esa ilegalidad, haciéndola legal, suponga un puñado de votos para algún que otro partido político.

Lo que me cuesta un enorme trabajo entender, cómo el Partido Popular, aprueba legalizar esa ilegalidad en el pleno del Ayuntamiento, a sabiendas, que jamás el Delegado del Gobierno, por cierto del Partido Popular, jamás podrá aprobar una ilegalidad, por my humanitaria que esta sea.

La Ley, dice nuestra Constitución, es igual para todos los españoles. Y que nosotros sepamos esto sigue siendo España, por mucho que algunos por intereses partidistas, quieran considerar españoles de primera y españoles de segunda. Eso ya no cuela, aquí todos somos españoles con nuestro derechos y nuestras obligaciones y nadie se puede saltar a la torera, la ley.

Y cómo atacamos para qué se deje de cumplir la ley, mirando a otro lado o como decía la sabia de mí abuela “haciendo la vista gorda”. Muy sencillo, se recurre a la manida frase, pasada de moda, llamándole “facha” al que quiere hacer cumplir la ley.

Esa frase, queridos míos, está más manida que la de “racista”. Tan manida está que ya no hace efecto alguno. Vamos, que los que más las usaban, han dejado de hacerlo porque nadie les hace caso.

Y es que a las palabras, “facha” y “racista” les pasa lo mismo que a una canción, que se les acabó de tanto usarla. Y probablemente, los que más usan las palabras “facha” y “racista”, sean los más ”fachas” y “racistas” que existan pues, en la mayoría de las ocasiones, se usan como una auténtica autodefensa.

Por lo visto los que defendemos nuestra Constitución y las leyes hemos pasado a ser, en un abrir y cerrar de ojos, a unos radicales de aquí te quiero ver. Los que se pasan por el arco del triunfo la defensa de nuestros derechos y libertades, los que el asunto de la legalidad les importa tres pepinos, los que sólo miran por sus intereses, que les supone arrancar un puñado de votos, en el hipotético supuesto que lo consigan, que eso está por ver, los que el cumplimiento de las leyes es algo que no lo tienen my claro, si estas no se adaptan a sus deseos. Todos estos, en los momentos actuales, son los moderados.

Y uno, en su inocencia política, se pregunta ¿Quiénes son esas gentes qué denominan fascistas a todos los que no piensan como ellos?, Igual son los auténticos fascistas, vaya usted a saber.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto