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El ministro de Justicia, Alberto
Ruiz-Gallardón gritó, durante la sesión del Parlamento, que
las mujeres en top-less que interrumpieron su intervención
lanzaron un “grito que es imposible de entender”.
Tan lerdo no puede ser, cuando está más claro que nunca la
intención de ese grito lanzado por las activistas de Femen.
El cinismo del ministro es evidente. En esa misma cámara se
han aplaudido, por los peperos, decisiones sangrantes para
los ciudadanos.
Aunque la verdad es que me choca la postura de las
feministas, porque siempre se quejan de que el cuerpo de la
mujer es usado como objeto y, sin embargo, a la mínima
ocasión se desnudan y proclaman que su cuerpo es un arma
política. ¿En qué quedamos?
Tampoco estoy de acuerdo en que usen un término religioso,
en referencia al aborto, por cuanto ser sagrado…
Para mí, personalmente no es ningún escándalo que se
muestren las tetas en cualquier lugar.
Lo escandaloso sería que se desnudara Rajoy contando la
verdad de los asuntos, sin excusas ni pretextos.
Para cinismo el de Cristóbal Montoro. Se nota, se vislumbra
que este señor nunca ha pisado una zona del país donde
podría observar todo lo contrario de lo que manifiesta tan
alegremente.
Que asegure en el Congreso que “… este año, los salarios no
están bajando en España, sino creciendo moderadamente”, tal
vez se refiera a Españistán ¿no?
No tiene vergüenza esta gente del PP, con representación en
el Congreso, al responder con ironías y demasiado cinismo,
no Cesario por otra parte, a los diputados que les hacían
preguntas.
Se olvidan completamente de sus actitudes durante la pasada
legislatura, cuando estaban en la oposición, y que
representaban lo más lerdo, en cuanto a altura intelectual,
y con una impresionante baja calidad oratoria.
No me extraña, por tanto, que estemos a la cola en
matemáticas y en literatura, si nos atenemos a las
directrices del ministro Wert sobre educación.
Se nota, se vislumbra que la mayoría de esta gente, que se
aprovecha de usar la mayoría silenciosa como arma, han
obtenido títulos y prebendas a través del tráfico de
influencias.
Difícilmente puedo creerme que lo hayan obtenido a través de
esfuerzos en los estudios.
Tenga cuidado, Cristóbal Montoro, porque llegará un tiempo
en que a la gente se le hinchen los cojones y salgan a la
calle a cortar cabezas.
Con todo, quiero creer que Cristóbal Montoro se estaba
refiriendo a su sueldo y el de los suyos, porque lo que es
al de la calle…
En la calle ya no corre ningún ‘santo inocente’ que se crea
esa especie de carta sacada de la manga: “es compatible que
se moderen y no pierdan poder adquisitivo”… ¿a qué clases de
economía asististe, Cristóbal?, esa es una filosofía de
partido podrido.
Como ejemplo retumbante está el colectivo de funcionarios…
lo llevan congelados y sin una paga extra. ¿A esto lo llamas
“subida moderada”?
Vamos, hombre, ahora quieres que nos volvamos tontos (por la
ley Wert) y nos chupemos el dedo (por los recortes en
Sanidad), total para sacarnos a gorrazos si mostramos las
tetas o cualquier otra parte de nuestro cuerpo.
En fin, la vida sigue y yo también.
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OPINIÓN / LAS NOTAS DEL QUIM
