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No podemos decir que, en estos
momentos, Ceuta esté viviendo los instantes más gloriosos de
su historia reciente, ni mucho menos.
Y es que la crisis que, en algunos lugares, se manifiesta en
lo puramente económico, aquí se ha notado en eso,
precisamente, y también en otros aspectos de la vida diaria
y que no vemos que se pueda poner en marcha todo lo que nos
está faltando últimamente.
Los años ricos, en dinero y en servicios, hace tiempo que
quedaron atrás y el servicio por aire, los viajes en
helicóptero que, durante más de una docena de años,
estuvieron operativos desde Ceuta a Málaga y luego, también,
a Algeciras, parece que han llegado a su fin.
Sé que habrá quien, especialmente de los muy cercanos a “la
vaca lechera” de la Santa Casa Madre, me va a decir, mañana,
pasado o esta misma tarde, que volverán a operar, no
tardando mucho y yo lo celebraría ( que operaran, no que me
lo diga cualquiera) porque todos y cada uno de nosotros
podremos hacer uso de ese servicio, aunque lo cierto y
verdadero es que, al menos de momento, ese servicio, que se
había reanudado hace muy pocos meses, tras muchos meses de
inoperancia, sigue sin estar operativo.
En cuanto a lo del helicóptero sanitario, todo parece
indicar que tendrá menos problemas que los que piensa el
personal, pero la duda y la desconfianza de este tipo de
servicios está en la calle y se necesitará verlo actuar para
que podamos decir que esto sigue igual. Bueno ..., igual no,
de otra forma que sería suficiente si fuera de una manera
efectiva.
Dos aspectos que hace 20 años parecía que no preocupaban
tanto, pero que hoy, con casi 14 años del siglo XXI a
cuestas, se ve como algo imprescindible que nos está
faltando.
Y lo que ha pasado y sigue sin estar solucionado es el
famoso contrato de interés público que, de momento, tendrá
que esperar, no sé a qué, pero que puede significar una
marcha atrás para los ceutíes que estamos aquí, pagamos aquí
nuestros impuestos y queremos tener todo lo que hasta ahora,
por lo menos, habíamos tenido.
El organismo competente y las navieras o la naviera
interesada están tardando en llegar a un acuerdo y de poco
nos sirve que se nos quiera dar toda la tranquilidad del
mundo, si vemos que el tiempo ha pasado y no se ha firmado
ese contrato.
¿Será que no interese a ninguna de las navieras? ¿O será que
se nos está dejando de la mano de Dios, en algo tan
necesario como es para Ceuta poder salir hasta el otro lado
del Estrecho?.
Tiempo al tiempo, y de momento calma en el otro problema que
azotó, con fuerza, a Ceuta, en el mes de septiembre: la
inmigración ilegal.
Aquí, y todos saben cual es mi forma de pensar en este
aspecto, tenemos la particularidad de que somos uno de los
puntos primeros, si es que no el primero, a donde llegan,
desde fuera, estos inmigrantes.
Hasta ahora se habían dado muchas de las llegadas por mar,
ahora ya hemos visto que, por tierra, incluso, llegan más y
en menos tiempo, con lo que el CETI o se multiplica o puede
quedar totalmente bloqueado, en cualquier instante.
Esto, y que nadie se asuste, representa una de las sangrías
nada despreciable para Ceuta y ya veremos qué tipo de fondos
van a llegar para poder hacer frente a algo, no buscado por
Ceuta, pero que está ahí con todo lo que significa y cuesta.
La pregunta que ahora se hace una gran parte de la población
en la calle es ¿Se nos trata igual que a los de otras
partes?. En cuanto a servicios, desde luego, está claro que
no.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
