Alonso Ramírez lamentó la derrota de su equipo frente al
Ceuta tras un partido que el técnico del Mairena calificó de
“igualado”. A pesar de que desde su punto de vista su equipo
mereció algo más, Ramírez lamentó finalmente que tuviese que
irse de vacío. “Ha sido un partido muy igualado entre dos
equipos muy potentes. Pero por detalles se ha decantado por
uno de ellos y en contra del otro”, afirmó.
El técnico del equipo sevillano declaró que “el Ceuta fue
superior durante diez minutos muy intensos de la primera
parte en los que consiguió los dos goles, que fue para
nosotros un mazazo”, sin embargo continuó asegurando que
“tras el descanso salimos con otra intensidad, creo que
estuvimos mejor, pero en una jugada puntual marcaron el
tercero”. “De marcar el 2-1 y meternos en el partido pasamos
a que ellos consiguieran marcar en la siguiente jugada con
un gol dudoso. Eso cambió todo el partido, y ahí se acabó”,
aseguró.
Para Ramírez, lo más positivo del encuentro es que “hemos
demostrado que nuestro equipo es bastante orgulloso, un
equipo batallador que no da nunca el brazo a torcer, e
incluso con el 3-0 hemos tenido varias ocasiones
consecutivas y nos hemos podido meter en el partido”.
En cuanto al Ceuta aseguró que es “un equipo muy compacto,
rocoso, típico de Tercera División, y va a ser uno de los
equipos que va a estar entre los cuatro primeros siempre”.
En lo que respecta al trabajo de los dos equipos, afirmó que
“nos cuesta mucho materializar las ocasiones de gol, pero
mis jugadores siempre han dado la cara. Por una cosa o por
otra no ha podido ser, pero creo que el resultado no ha sido
justo para lo que han hecho los dos equipos”.
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