ADICAE ha mantenido esta semana una reunión con
representantes del Ministerio de Industria para exponer su
“rotundo rechazo a la reforma eléctrica”. Para la asociación
“el objetivo de esta mal llamada reforma es meramente
recaudatorio, ya que su único objetivo es que los
consumidores paguen un déficit generado entre el Estado y
las empresas eléctricas, fruto de una serie de decisiones
políticas cuyos únicos beneficiarios han sido las grandes
compañías del sector”. Por ello, y según informó en un
comunicado, ADICAE, que ya ha presentado alegaciones a la
ley, va a solicitar al Defensor del Pueblo que intervenga
para paralizar la reforma y que esta se replantee en su
totalidad.
El déficit se ha generado de forma opaca, por lo que ADICAE
ha exigido al Ministerio que aplique un proceso de
transparencia que permita a los consumidores conocer cómo se
ha incrementado esta deuda hasta los 28.000 millones de
euros, a pesar de las constantes subidas del recibo para los
consumidores.
Pago del consumidor
Para evitar que el déficit tarifario continúe creciendo al
ritmo de 4.500 millones al año, el Gobierno ha previsto que
ese incremento sea paliado entre las empresas, el Estado y
los consumidores. El importe a cubrir por los consumidores
es de 900 millones de euros anuales, lo supone que, de
media, cada consumidor deberá pagar a través de sus facturas
al menos 32,50 euros extra al año para paliar el incremento
del déficit. Eso sin contar con lo que se abonará
indirectamente a través del Estado, que debe aportar otros
900 millones anuales.
|