El Gimnasio Ceuta Goyu-Ryu firmó ayer un merecido y agónico
empate frente al Nervión tras un partido igualado que no se
resolvió hasta los minutos finales. Con las dos escuadras
muy bien situadas sobre el terreno de juego, fue el conjunto
gimnasta el que contó con alguna ocasión más clara, aunque
fueron los sevillanos los que, en el 84’ se adelantaron
gracias a un gol de Moro. Ya en el descuento, sin embargo,
Munir consiguió tras un córner el 1-1 definitivo.
El Goyu-Ryu saltó al campo con intensidad, aunque se
encontró con un Nervión que no le puso las cosas fáciles en
el centro del campo. Bilal fue el primero en poner algo de
peligro en el Alfonso Murube con una contra bien truncada
por la zaga sevillana, mientras que poco después Óscar
dispuesto de una buena falta desde la frontal del área que
despejó bien a saque de esquina el guardameta caballa.
Con el paso de los minutos se mantuvo la igualdad en el
centro del campo, aunque fue de nuevo el Goyu-Ryu el que lo
intentó primero con un disparo cruzado de Quisco que se
marchó muy cerca del segundo palo. La última ocasión del
primer tiempo llegó pasada la media hora de juego, con un
remate de cabeza del ceutí Said tras un córner que blocó sin
problemas el portero sevillano, alcanzándose el descanso con
el empate a cero inicial.
Durante el segundo tiempo se mantuvo la igualadad sobre el
terreno de juego, siendo el Goyu-Ryu el que contó con la
ocasión más clara del partido con un mano a mano de Juanma
con Javi que ganó el guardameta del Nervión. Ya en el 84’,
Moro consiguió adelantar de cabeza al conjunto sevillano,
momento en el que los ceutíes se volcaron al ataque en busca
del empate. Ya en el 93’, Quisco botó a la perfección un
saque de esquina desde la izquierda que, tras ser rematado
por Munir de cabeza se convirtió en el 1-1 con el que acabó
el partido.
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