El personal de la comunidad universitaria de Ceuta, que
afronta en el presente curso académico el estreno del nuevo
campus universitario, con la concentración de Facultades en
el antiguo cuartel del Teniente Ruiz, cumpliendo un anhelo
de muchísimos años, aprecia una notable rentabilidad para la
economía local, con la presencia de un ambiente
universitario real en nuestra ciudad.
Destacados profesores universitarios consideran que el
verdadero “motor” a muy corto plazo de la economía local no
es el turismo -por muchos esfuerzos que se quieran hacer- ni
tampoco ningún tipo de industria sino el ambiente
universitario y la generación de actividad económica que
provocaran los más de mil alumnos que acudirán a las aulas
del nuevo campus. Un centro neurálgico de índole educativo y
también económico, ya que estudios que se hicieron en su
momento, allá por los años 80, cuando se comenzó a atisbar
la idea primigenia de un nuevo campus universitario para
nuestra ciudad, objetivo que algunos consideraban una
verdadera entelequia, cifraban en un gasto anual por alumno
de millón y medio de pesetas. Hoy, volviendo a retomar esa
evaluación de aplicación económica al consumo del alumnado
que cursa sus estudios en nuestras facultades, se estima que
el aumento del gasto es considerable en las actuales
circunstancias y se sitúa en los 14.000 euros.
Un incentivo muy importante y a tener muy en cuenta para
nuestra maltrecha economía local que se verá dinamizada por
el consumo en cuanto a alojamiento y manutención, así como
actividades de ocio, con independencia del ambiente
universitario que provoca una concentración de estudiantes
de todas las titulaciones a cursar en nuestra ciudad más el
Instituto de Idiomas que se convierte en un complemento
educativo.
El componente económico, del que se ha hablado poco, es
fundamental y decisivo para impulsar, a muy corto plazo, la
actividad económica interior, ya que pese a que existe una
Residencia de Estudiantes, su número de plazas es
insuficiente para aglutinar el alojamiento de tantos
estudiantes que nos llega desde Andalucía y otros lugares de
la península o del norte de Marruecos.
Por primera vez, parece que tras la desaparición del
Servicio Militar obligatorio y con ello la ausencia de esos
contingentes de soldados que dotaron a Ceuta de un auge
considerable, es ahora la Universidad y, más concretamente,
los estudios universitarios, los que toman el testigo de un
impulso de capital importancia en las actuales
circunstancias económicas de crisis y austeridad.
El aumento de matriculaciones en nuestras facultades y el
sentimiento universitario que se ha despertado con las
nuevas instalaciones, convierten en muy atractivo el curso
que comenzara de inmediato.
Las comodidades, la ubicación de la Universidad de Ceuta, el
propio ambiente universitario que se genera y, en
definitiva, la pujanza de una nueva forma de atraer riqueza
a nuestra ciudad, son componentes a tener muy en cuenta.
La comunidad universitaria de Ceuta, con independencia de
las primeras incomodidades en la fase de adaptación y puesta
en marcha, se muestra muy satisfecha del salto cualtitativo
que se ha dado.
Hasta la última semana del presente mes y una vez que se
conozcan las calificaciones obtenidas por los estudiantes
que se presenten a la Selectividad, no se conocerá a ciencia
cierta el número exacto de matriculaciones para el inminente
curso a comenzar 2013-2014, aunque todas las previsiones
apuntan a que el aumento en relación al pasado curso será
muy considerable, ya que por primera vez, las familias
ceutíes aprecian que cuentan en su propia ciudad con
universidad propia, lo que evitaría la salida masiva de
estudiantes ceutíes a otras universidades de la península.
De esta manera, el campus universitario de la Universidad de
Granada en Ceuta, como en su día ya ocurriera con Jaén o
Almería, adquiere vida propia y cierta autonomía de
funcionamiento con la expansión que se le supone por el
entorno geográfico en el que está situado. Unas perspectivas
que abren un horizonte de esperanza y optimismo que conlleva
el ineludible componente económico y el académico a la par,
junto “tirón” universitario de reclamo para las zonas
limítrofes.
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Un sueño hecho realidad por la apuesta del Gobierno local
El empeño del Gobierno de Juan
Vivas en dotar a Ceuta de un nuevo campus universitario, se
ha hecho realidad. Bien es verdad que en los años 85 y 95,
el PSOE ya intentó que los estudios universitarios de
nuestra ciudad tuvieran una mayor dimensión, pero lo cierto
es que los avatares políticos y electorales han hecho que
sea el Partido Popular, quien haya culminado un viejo anhelo
de la sociedad ceutí: que Ceuta tuviera su propia
Universidad.
Para algunos, el emplazamiento del acuartelamiento del
Teniente Ruiz, era el lugar ideal y este curso 2013-2014,
por fín será una realidad la puesta en marcha de un viejo
proyecto que hace tiempo que dejó de ser una idea para
convertirse en una realidad. Ahora, hay que buscarle la
rentabilidad necesaria para obtener beneficios de un
ambiente universitario importante, que requiere progresión y
no conformismo.
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