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Ha sido una nueva atracción y una
forma más de recaudar ciertos establecimientos, aunque a
otros no les ha tocado esa parte extra del pasado fin de
semana.
Este tipo de fiestas extra suele gustar a todo aquel al que
le apetece salirse de la rutina y poder cambiar de ambiente,
en sus formas de alternar.
Eso sucede aquí y sucede en otros mil sitios, en cada uno de
los cuales lo disfrazan como más atractivo pueda resultar a
la población.
Visto lo visto y por los comentarios que han ido surgiendo,
especialmente una vez finalizada dicha feria, para los
organizadores ha sido un éxito, para los bares que
estuvieron en primera fila, más éxito todavía, sin embargo
para muchos de los vecinos o para aquellos bares a los que
no les tocó nada, esa feria ha sido el negocio de unos
cuantos, sin permitirse a otros tocar parte de la “tarta”.
Que la asistencia de ceutíes ha sido masiva no lo discute
nadie, pero que los comerciantes de la zona y sus vecinos
están molestos eso está más claro todavía.
Así las cosas, como de lo que se trataba, inicialmente, era
de que hubiera algo nuevo, la Viceconsejería de Festejos se
ha apuntado un tanto, el éxito va hacia esta parte, pero lo
malo de todo ello es que, un mes, tan sólo un mes, después
de las Ferias de Ceuta, montar este nuevo “chiringuito” hace
que más de un ceutí rechine los dientes con numerosas quejas
y protestas formuladas por aquellos que no han tenido arte
ni parte en todo este montaje, del que han recogido las
incomodidades, especialmente del ruido, hasta más tarde de
lo esperado.
Dice un refrán que “nunca llueve a gusto de todos” y así
parece, en esto también, en lo que no todos son capaces de
ver el fondo de una de estas ferias artificiales, no
tradicionales, que surgen del interés o de la imaginación de
unos, para beneficio de otros, más o menos allegados, pero
con el inconveniente de que frente a esos beneficiados va a
haber otros que sin comerlo, ni beberlo (nunca mejor dicho)
salen muy perjudicados.
Tres plazas se eligieron para esta Feria de Día
Gastronómica. Todas ellas céntricas, pero demasiado cercanas
las unas a las otras, con lo que la feria parecía de una
sola barriada, del centro, sin que a los demás les fuera a
tocar nada. Este error habrá que corregirlo, si es un simple
error, y no un interés especial de alguno o algunos. Por
ejemplo.
Y tras tres días muy intensos, en cuanto a actuaciones y
concurrencia, en la tarde-noche del domingo la Feria de Día
Gastronómica echaba el cierre, dejando en el ambiente la
idea de que es posible organizar cosas de este tipo, pero
siempre que sean los particulares, los que van a sacar
provecho de ello, y no tanto los organismos oficiales con
beneficios para unos, molestias para otros y para la mayor
parte sin haberles tocado nada.
Buenas actuaciones musicales, en directo, bailes de
sevillanas y un premio de 300€ a la mejor tapa de la Feria
de Día, tapa presentada por La Bodeguilla.
Casi una veintena de casetas ofrecieron a sus clientes una
gran cantidad de tapas y de raciones, con mucha variedad y
con todo tipo de gustos para los concurrentes.
De no ser por las quejas de muchos vecinos, hubiera sido un
éxito total, así sin embargo lo podremos dejar en división
de opiniones.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
