Una mujer de 31 años de edad denunció ayer tratos
vejatorios y una agresión por parte de un agente de la
Policía Nacional cuando se disponía a cruzar hasta
Marruecos. La mujer, que presentó una denuncia en el Juzgado
de Instrucción número seis de Ceuta, tuvo que ser atendida
por una crisis de ansiedad.
Una mujer musulmana con permiso de residencia comunitario
denunció ayer en el Juzgado de Instrucción número seis de
Ceuta una presunta agresión por parte de un agente de la
Policía Nacional cuando se procedía a cruzar hasta
Marruecos, F.E.K, de 31 años de edad y residente en Ceuta,
todavía nerviosa por lo ocurrido en la frontera, relataba a
EL PUEBLO la “desagradable” situación que tuvo que vivir y
los “tratos vejatorios” que tuvo que sufrir a manos del
citado agente de la autoridad, a la vez que resaltaba que
este hecho le produjo una crisis de ansiedad, teniendose que
personar hasta el lugar de los hechos una ambulancia del 061
que posteriormente la trasladaría hasta el servicio de
Urgencias del Hospital Universitario de Ceuta.
La mujer, quien acudió con su marido hasta las dependencias
de este diario para denunciar los hechos, trajo consigo la
pertinente denuncia así como un parte de lesiones realizado
en el Hospital Universitario en el que queda reflejado que
fue atendida de una fuerte crisis de ansiedad así como de
contusiones en un brazo.
Durante la denuncia, F.E.K, manifiesta que cuando se
disponía a cruzar la frontera al lado de Marruecos, el
agente de la Policía Nacional le impidió el paso diciéndole
que “no pasa porque no me da la gana” y no ofreciéndole
ningún motivo legal para dicho impedimento.
Ante su insistencia, tal y como relata la mujer, y tras
indicarle al agente que tenía toda la documentación en regla
y que es residente en Ceuta, éste le arrebató el bolso que
portaba, sacándole toda la documentación del mismo y tirando
posteriormente el bolso al suelo, y que cuando le solicitó
al policía que le devolviera el bolso este se negó y le dijo
que se dirigiera ella si quería a por el mismo, agarrándole
y tirándole fuertemente del brazo. En ese instante, F.E.K
asegura que se dirigió al policía para pedirle explicaciones
de porqué la trataba y agredía de esa forma y que el agente
de la CNP le dijo “aquí no sólo agarramos sino también
pegamos”.
La mujer, que se encontraba sóla en ese momento para pasar a
Marruecos, llamó a su marido y tras presentarse en la
frontera y pedir explicaciones al agente y al superior de
éste, se negaron a ofrecérsela e incluso a facilitarle el
número de placa para proceder a interponer la denuncia
pertinente.
El marido de la F.E.K. criticó duramente el “trato
vejatorio” que asegura sufrió no sólo su mujer sino el mismo
y en la denuncia presentada solicita que se tomen cuantas
acciones civiles y penales pudieran corresponder a este
suceso.
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