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La Guardia Civil detuvo en la tarde de ayer al conductor
de un vehículo por darse a la fuga en un control rutinario
que la Benemérita estaba realizando sobre las 18.30 horas en
el kilómetro 0,5 de la N-352. Cuando los agentes le dieron
el alto, aceleró y chocó contra un muro en la zona de Juan
XXIII y contra un coche que estaba estacionado.
La Guardia Civil detuvo ayer al conductor de un vehículo por
darse a la fuga en un control rutinario que la Benemérita
estaba llevando a cabo en el kilómetro 0,5 de la carretera
nacional 352 en dirección a Marruecos. Según informaron a
este diario fuentes del instituto armado, cuando los agentes
dieron el alto al vehículo, el conductor aminoró primero la
marcha, pero después aceleró y huyó de los agentes
adelantando a vehículos en dirección contrario. El coche
subió por la cuesta de Juan XXIII y perdió el control,
chocando contra un muro y un vehículo que estaba
estacionado. Tras el golpe, el conductor salió corriendo
pero los agentes lograron interceptarle. Mientras, muchos
ciudadanos insultaron al conductor, ya que podría haber
provocado “una desgracia mayor”.
Todavía se recuerda el atropello cerca del lugar donde
ocurrió el accidente de ayer, sobre las 18.30 horas, que
provocó la muerte de la pequeña Jennifer A.M., el pasado 27
de julio. La pequeña se encontraba cruzando el paso de
peatones de Miramar Bajo junto a su madre y su abuela cuando
fue arrollada por un coche. Según testigos, el vehículo
adelantó a otros que se encontraban parados para dejar pasar
a la familia.
El conductor del ‘Mitsubishi Montero’, de matrícula
nacional, ha sido trasladado hasta las dependencias de la
Comandancia de la Guardia Civil, donde permanecerá hasta ser
llevado a disposición judicial. El arrestado, R.E.E., de 44
años de edad, es marroquí pero dispone de permiso de
residencia en España y conducía sin carnet.
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