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Una trabajadora del SEPE ha denunciado a un usuario por
“actitud muy agresiva”. El hombre la llamó “hija de puta”,
después de que ella se negara a darle la prórroga de un
subsidio por carecer de un documento en vigor, según recoge
el atestado. USO exige al delegado del Gobierno “mayor
seguridad” en estas instalaciones.
Una trabajadora del Servicio Público de Empleo Estatal
(SEPE), F.M., denunció ayer en la Comisaría de la Policía
Nacional la actitud que había tenido un usuario del centro
un día antes. La funcionaria la calificó como “muy
agresiva”, según recoge el atestado.
Los hechos ocurrieron a las 10.10 horas del miércoles,
cuando la trabajadora se encontraba en su puesto, atendiendo
a un usuario. El hombre denunciado, S.H., se sentó donde
estaba la trabajadora con la intención de solicitar la
prórroga de un subsidio. Para ello, la empleada le solicitó
la documentación necesaria, pero comprobó que el certificado
de rentas de hacienda marroquí de la esposa del solicitante
estaba caducado. Por ello, le comunicó que necesitaba
presentar dicho documento en vigor y que cursaría la
solicitud pero que no podría ser resuelta hasta que no
presentara el documento válido ante la administración.
Fue en ese momento, según recoge la denuncia presentada,
cuando el solicitante “comenzó a increpar a su esposa”, que
estaba a su lado. Empezó también a “vociferar y hacer
aspavientos” e insistir en que la funcionaria aceptara el
documento, a lo que ella se negó.
El usuario llegó “incluso a solicitar que la trabajadora
cursara el subsidio como si fuera soltero y sin hijos”, a lo
que la funcionaria “se negó en rotundo”.
“Este individuo tomó una actitud muy negativa, tirando el
resguardo a la cara de la dicente y solicitando
entrevistarse con el director del centro”, recoge la
denuncia.
La trabajadora se desplazó entonces al despacho del director
y el denunciado la siguió, entrando en la habitación sin
permiso, gritándole palabras en árabe que ella no entendía y
llamándola “hija de puta”, según recoge el atestado. Fue
entonces cuando intercedió el vigilante de seguridad para
intentar “sosegar” al hombre, que se “enfureció aún más”,
por lo que el vigilante tuvo que separarlo a la fuerza y
llevarlo a un lugar apartado del resto de personas que se
encontraban en el Servicio de Empleo.
El vigilante, que sí entiende el idioma árabe, tradujo a la
trabajadora lo que el denunciado había dicho a gritos en
árabe: “Voy a arrasar la oficina, voy a romper los
ordenadores. No me importa volver a Los Rosales”.
En esos momentos apareció el director del centro y llamó al
091, el teléfono de la Policía Nacional. Mientras, el
vigilante logró sacar del centro, “tras muchos esfuerzos”,
al solicitante.
Instantes después, un agente del CNP se personó en el lugar
y se entrevistaron con el usuario, que ya estaba en la
calle. Los funcionarios pidieron que se interpusiese una
sanción por la L.O. 1/92, por desórdenes y resistencia.
Citación judicial
La trabajadora recibió ayer una citación judicial para que
acuda hoy al Juzgado de Instrucción Número 6 a fin de
ratificar su denuncia y que siga el curso legal. Sin
embargo, ha recibido dicha citación a título personal y no
como trabajadora del centro en activo durante el altercado,
informan fuentes sindicales.
No es la primera vez que suceden incidentes en el SEPE,
según destaca USO, que exige una “mayor seguridad” en estas
instalaciones. Desde el sindicato explican que hace unos
días un usuario lanzó una silla a un trabajador, rozando a
una de las funcionarias que se encontraban en la sala.
Además, una de las empleadas, vio en una ocasión entrar a un
hombre con una pistola en la oficina, explica Montero, por
lo que pide que se ponga un arco de seguridad.
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USO sostiene que esta situación es “inadmisible e
inaceptable”
“Inadmisible e inaceptable” son
los términos con los que USO (Unión Sindical Obrera)
califica estos episodios de violencia en las instalaciones
del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Por ello,
Juan María Lorenzo, secretario general de USO, exige que se
tomen “las medidas necesarias” para que estos conflictos no
vuelvan a producirse. USO pide responsabilidades al delegado
del Gobierno, Francisco Antonio González Pérez. “Estas
instalaciones no tienen suficiente seguridad, sólo hay un
vigilante y no hay arco de seguridad”, explica USO. “Los
empleados públicos están demonizados y hay que dignificar su
tarea porque se enfrentar a situaciones como esta, para los
trabajadores del SEPE no es de buen grado encontrarse cada
día con las historias de las personas en paro”, apunta USO,
quien exige medidas en este sentido.
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