La senadora y abogada, Luz Elena Sanín, miembro de la
delegación española ante la Unión Europea, nos habla de los
temas que más se debaten y preocupan en el seno del Consejo
de Europa del que ella forma parte. El control fronterzo
externo a la Unión Europea, la lucha contra la trata de
seres humanos, en especial mujeres y niños, el tráfico de
órganos, la explotación sexual y laboral de todos ellos y la
nueva forma de esclavitud a través del tráfico de migrantes,
son las cuestiones más debatidas. La cooperación entre los
estados miembros en materia de crimen internacional y
terrorismo, es una cuestión que se viene abordando con
especial interés para mantener la seguridad común de la
Unión Europea y de sus Estado.
Pregunta.- El Consejo de Europa ¿qué ha abordado en su
última reunión a la que asistió como miembro de la
Delegación española ante la unión Europea?
Respuesta.- Como ha venido siendo habitual en el Consejo de
Europa se han venido debatiendo con total eficacia, una gran
cantidad de asuntos que atañen a todos los Estados miembros
y como no, a la comunidad internacional en su conjunto. En
los distintos Rapporteur se somete a debate los conflictos
internos de los Estados miembros del Consejo de Europa, los
conflictos internacionales que pueden poner en peligro la
paz en el mundo y como no puede ser de otra forma, los
derechos humanos en todas sus facetas e incluso, su ausencia
en algunos de los estados miembros.
P.- La libre circulación de personas obliga a un nuevo
orden mundial en cuanto al ámbito de la seguridad ¿no?
R.- La libre circulación de las personas ha sido y seguirá
siendo uno de los pilares en los que se sostiene la U.E. y
cuando éste proclama, los Estados miembros se ven precisados
a salvaguardar las seguridad de los ciudadanos europeos y a
combatir la delincuencia organizada siempre dentro de ese
espacio de libertad, seguridad y justicia que tanto nos ha
costado construir. Un marco de libertad, seguridad y
justicia que como garante de los derechos humanos, se ha ido
reforzando con las distintas medidas adoptadas en las
instituciones europeas entre ellas, la creación de los
grupos TREVI centrado en la lucha contra el terrorismo y la
formación y organización de las autoridades policiales. En
el Tratado de Maastricht (1992) por ejemplo, se menciona la
cooperación policial y aduanera haciendo alusión al interés
común en el ámbito de la Unión Europea. Y en el Tratado de
Ámsterdam (1999) se amplía este concepto reforzando el marco
institucional.
En 1985 Francia, Alemania, Bélgica. Luxemburgo y los Países
Bajos, deciden crear entre ellos un territorio sin frontera
conocido como el Espacio Schengen, que deriva en un concepto
mucho más amplio en 1990 con el Acuerdo Schengen por el que
se suprimen los controles fronterizos entre los Estados
miembros pero se establece con un mayor control en la
frontera exterior común.
En definitiva, el “Acervo Schengen” exige un mayor control
en las fronteras exteriores de la Unión Europea como la más
eficaz medida en la lucha contra el crimen internacional y
tema ya recurrente en los debates que sus suscitan en la
Asamblea del Consejo de Europa ante el incremento del
terrorismo internacional; y como no, la eficacia de las
medidas adoptadas y la implementación de las mismas en
especial, las medidas relativas a la cooperación policial y
aduanera siempre dentro de ese marco de libertad, seguridad
y justicia.
P.- No solo el terrorismo es preocupación del Consejo de
Europa. ¿Hay otras cuestiones de interés en los debtaes?
R.-Precisamente sobre la base del Tratado de Ámsterdam, se
establecen una serie de iniciativas coordinadas y relativa a
la lucha contra la trata de seres humanos y la explotación
sexual de los menores como por ejemplo el programa Stop II,
destinado a cofinanciar los proyectos presentados por toda
institución, asociación y organismo privado o público de los
Estados Miembros que desarrollen una actividad de asistencia
a las víctimas o a la lucha contra el tráfico ilícito de
todo orden. De igual forma, la Unidad de Cooperación
Judicial de la Unión Europea creada con la finalidad de
fomentar y mejorar la coordinación entre las distintas
autoridades competentes de los Estados miembros de la Unión
Europea para reforzar la lucha contra las formas graves de
delincuencia organizadas transfronteriza como el terrorismo,
la trata de seres humanos en todos sus ámbitos especialmente
la trata de mujeres y niños, el narcotráfico, el blanqueo de
capitales etc con el fin de llevar a los delincuentes ante
la justicia de forma rápida y eficaz.
En modo alguno podemos olvidar, que La U.E. aparte de una
unión económica, también se caracteriza por la defensa de
los derechos fundamentales y precisamente dentro de estos
objetivos, aprobar programas, directivas, decisiones y
protocolos que engloban el conjunto de su acción en la lucha
contra el crimen internacional transfronterizo y más
concretamente, un conjunto de acciones contra la trata de
seres humanos en especial mujeres y niños.
Y es la directiva 2011/629/JAI del Consejo la que viene a
conductas que la enmarcan tales como la captación, el
transporte, la acogida o la recepción de personas, incluido
el intercambio o la transferencia de control sobre estas
personas con fines de explotación bajo sus diferentes formas
como la prostitución, trabajos forzados etc, así como las
bases sobre las sanciones penales y sus agravantes cuando se
trata de mujeres, menores de edad y cuando se utiliza la
violencia. Y para estos fines, el programa Daphne como parte
de un conjunto de acciones establecido para un periodo de
cinco años comprendido entre el 2007 y el 2013.
P.- Esfuerzos importantes que hay que desplegar para la
lucha contra las mafias ¿verdad?
R.- Se ha hecho mucho pero mucho más falta por hacer ya que
lamentablemente y en algunos casos, las mafias van por
delante de los controles policiales y en ocasiones, la
actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de los
Estados pese al esfuerzo y brillante labor, llegan cuando
los hechos, el ilícito está ya consumados; es decir, cuando
el crimen ya se ha cometido dejando esa estela de dolor en
la sociedad en general y en las familias en particular.
P.- Las mafias se despliegan bajo diversas modalidades de
explotación. No sólo en el ámbito sexual sino laboral, de
órganos...un sinfín de escalofriantes actuaciones ¿no?
R.-Se han estudiado, debatido y aprobado en el Consejo de
Europa ponencias y acciones en protección de las mujeres y
los menores como partes más vulnerables frente a las mafias
organizadas y transfronterizas que tienden sus tentáculos
sobre ellas y ellos con fines de explotación sexual,
laboral, tráfico de órganos y las más abyectas formas de
esclavitud, así como también lo es, el trabajo sumergido que
no es más, que otra forma de explotación del ser humano; es
decir, una mano de obra barata sin ningún tipo de
prestaciones.
P.- ¿Cuál es la forma de esclavitud más utilizada?
R.- El tráfico ilícito de migrantes por tierra, mar y aire,
es una de las formas de esclavitud más utilizadas con ánimo
de lucro y en ocasiones que no son pocas, con fines de
explotación sexual; de ahí, la importancias de la
cooperación entre los Estados signatarios para proteger los
derechos de las víctimas y complementar con hechos
decisivos, la Convención de las Naciones Unidas contra la
delincuencia organizada.
Y precisamente la Directiva 2004/81 CE del Consejo de 29 de
abril de 2004 ha tenido como objetivo prioritario, el
permiso de residencia a los nacionales de países terceros
que sean y hayan sido víctimas de trata de personas o que
hayan sido víctimas de inmigración ilegal; de ahí, la
necesidad de mejorar la cooperación con los nacionales de
países terceros que hayan sido involucrados en este tipo de
acciones para que puedan actuar más eficazmente.
En definitiva, se ha valorado muy positivamente el programa
específico de prevención y lucha contra la delincuencia
internacional transfronteriza (2007-2013) que ha venido
ofreciendo a los ciudadanos de la U.E. un alto grado de
seguridad dentro de un espacio de libertad, seguridad y
justicia y a través del cual, se han venido desarrollando
las mejores prácticas en materia de protección de testigos,
en materia de protección de las víctimas del delito y para
garantizar el orden público.
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