La Administración Concursal de Afinsa está ultimando un
envío masivo de 190.000 cartas a todos los afectados para
ofrecerles la opción de recuperar el 5% de su inversión
inicial y seguir en el proceso concursal, o bien que les
devuelvan una filatelia de “dudoso valor” y salir de este
proceso, “un absurdo ya que ha quedado demostrado el
carácter financiero de la entidad y que los afectados no
pretendían comprar sellos”.
Una vez solicitados, se prevé que los pagos comiencen en los
meses de noviembre y diciembre de este año. De los 2.207
millones de euros que Afinsa tiene retenidos tan sólo
devolverán 110 millones.
Ante la complejidad del procedimiento y las dudas que
suscitará entre los afectados, la Plataforma de Adicae
ultima una campaña de información por toda España a través
de asambleas públicas para poder llegar al mayor número de
afectados. Esta campaña de asambleas servirá también para
aumentar la movilización y organización de los afectados que
seguirá aumentando hasta que los políticos den una salida a
esta vergonzosa situación. A este respecto el próximo día 12
a partir de las 20.30 horas en el salón de actos de los
sindicatos Adicae celebrará una asamblea informativa para
todos los afectados.
Precisamente, Adicae, a través de un comunicado de prensa,
exige una solución real frente al fallo manifiesto del
Estado de Derecho que arroja una cuenta de: 470.000
víctimas, 10 juzgados estériles, 0 responsables y 0
soluciones. En más de 385 ocasiones se ha debatido en el
Congreso y en el Senado la necesidad de soluciones políticas
pero sin que lleguen a cumplir los compromisos asumidos.
Para acabar con este despropósito legal y concursal, Adicae
ha propuesto al Gobierno y a los grupos parlamentarios una
solución razonable por la que el Estado adquiera los
derechos reconocidos a los afectados en el proceso concursal
a través de su compra por el Instituto de Crédito Oficial
(ICO). Esta solución se asemeja a la llevada a cabo en los
años 90 en el caso de la quiebra de la promotora PSV. Ello
no supondría aumento del déficit y permitiría a los
afectados recuperar la mayor parte de sus ahorros, por lo
que lo único que se necesitaría es voluntad política
cumpliendo las promesas de solución.
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