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La obra de emergencia aprobada por
el Ministerio de Fomento para habilitar un carril más, que
sería el tercero en dirección a la frontera del Tarajal,
aparte de ser una solución provisional de cara al proyecto
de ampliación y remodelación de la frontera, es una
actuación oportuna con vistas a la ya inminente Operación
Paso del Estrecho y en evitación de los atascos que se han
venido produciendo por el colapso circulatorio que se ha
originado. Se hace necesario dotar de mayor fluidez el
tránsito por esa vía con independencia de que siga su curso
el proyecto a desarrollar en la frontera.
Ana Pastor se comprometió el 5 de marzo a reconocer las
demandas de mejora de nuestras autoridades y, de momento, el
primer paso ya está dado con la urgencia que requiere el
asunto y con la disposición de 400.000 euros para su puesta
en marcha. La nacional N-352 contará con un tercer carril en
sentido hacia la frontera con unas actuaciones que pueden
finalizar en quince o veinte días, ya que el 15 de junio se
inicia la OPE y requiere de fluidez de tránsito. Y mientras,
habrá que circular con precaución por ese tramo, aunque las
incomodidades puntuales son el “precio” de la mejora casi
inmediata de esta carretera.
Si se ha dicho en múltiples ocasiones que esta carretera es
la entrada a Ceuta y había de contar con la consideración de
tal a todos los niveles, bueno es que desde el Ministerio se
acometa esta obra de emergencia ampliando una vía que así lo
requiere. La circulación por nuestras carreteras no puede
convertirse en un problema para quienes las transitan, sino
en un componente acorde con el carácter europeo que nos
confiere nuestra condición de benefactores de los programas
comunitarios en lo que es la puerta de Africa.
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OPINIÓN / EDITORIAL
