El Ministerio de Fomento ha autorizado esta semana una
“actuación de emergencia” con el objetivo de “evitar
colapsos” en la N-352. La obra supondrá un desembolso por
parte del Ministerio de unos 400.000 euros y desde la
Delegación de Gobierno se prevé que en un plazo de 15 a 20
días ya se encuentre habilitado un tercer carril en
dirección a la frontera.
El Ministerio de Fomento ha autorizado esta semana una
“actuación de emergencia” con el objetivo de “evitar
colapsos” en la N-352, que se dirige a la frontera del
Tarajal. Tanto el Área de Fomento de la Delegación de
Gobierno, con Bharat Bhagwandas al frente, como los
ingenieros técnicos de la Demarcación de Carreteras de
Andalucía Oriental han trabajo en la puesta en marcha de
este proyecto. Las primeras mediciones se llevaron a cabo en
el mes de abril, tal y como informaba EL PUEBLO en su
edición del día 24 de ese mismo mes. Bhagwandas y los
técnicos se trasladaban hasta la zona de la Almadraba para
realizar mediciones y “valorar las distintas opciones”.
Así, se decidió la habilitación de un tercer carril hacia la
frontera. “Quedarán tres carriles hacia el Tarajal y dos por
el otro lado”, resalta Bhagwandas. Los trabajos han
comenzado con la delimitación y la ubicación de señalización
de obra, como el pintado de las líneas de la carretera de
color amarillo para que los conductores extremen las
precauciones. Y es que, la carretera nacional no cuenta en
todo el tramo en el que se va a actuar con el mismo ancho de
vía, con lo que en algunas partes, continúa Bhagwandas, será
necesario “retranquear” por el lado derecho en sentido a la
frontera.
“Por razones de seguridad de los vehículos y de los peatones
los carriles deben tener un ancho mínimo y en cada tramo es
diferente; de ahí que haya secciones que se tengan que
retranquear y coger terreno en la parte derecha”, explica.
Al ser una obra pública, los trabajos se han dividido en
“secciones”, desde donde se encontraba el antiguo
restaurante ‘La Barraca’ -después de la Almadraba-, hasta el
Tarajal.
El presupuesto de la obra es de unos 400.000 euros y el
plazo previsto para finalizar será de “quince o veinte
días”, señala el director del Área de Fomento. La intención
de la Delegación de Gobierno es llegar a tiempo para que la
carretera se encuentre en condiciones al comienzo de la
Operación Paso del Estrecho (OPE), que se iniciará el
próximo día 15. Incluso se está trabajando durante los fines
de semana.
Colaboración ciudadana
A lo largo de estos días se limitará la velocidad de
tránsito por el tramo en obras a 30 kilómetros por hora.
Además, tanto la Guardia Civil como la Policía Local se
encargarán de controlar el tráfico en el caso de que se
produzca algún atasco. También estará prohibido estacionar
-tampoco de forma provisional-, para evitar problemas al
tránsito de los coches. Desde el Área de Fomento de la
Delegación se solicita colaboración ciudadana y también se
propondrán, a partir del próximo lunes, rutas alternativas
como es la avenida Reyes Católicos. Desde la representanción
del Gobierno de España en Ceuta se solicita a los usuarios
de la carretera “colaboración y paciencia”.
Esta obra de emergencia pretende ser la solución provisional
a los continuos colapsos que se venían produciendo en esta
carretera nacional, y que han causado retrasos, por ejemplo,
de hasta una hora en los servicios de transporte público
colectivo. También los servicios de emergencia, como
Bomberos o ambulancias se han visto afectados por los
embotellamientos. Un mes después de anunciar la búsqueda de
una solución de “emergencia”, ya se trabaja en la
habilitación de este tercer carril.
Es la segunda obra que pone en marcha en la ciudad el
Ministerio de Fomento desde que se iniciara la legislatura,
ya que la primera fue a restauración del puente Virgen de
África. Este puente, situado también en la N-352, y tras
seis meses de trabajos fue abierto de nuevo al tráfico el
pasado 29 de noviembre. La sección definitiva ha quedado
constituida por dos carriles de sentido único de 3,25 metros
de ancho y arcenes de 0,45 metros. Tras esta reforma, la
calzada ha quedado separada de ambas aceras por una barrera
prefabricada de hormigón, protegiendo así a los peatones. El
presupuesto ha supuesto una inversión de Fomento de
1.240.856 euros.
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