|
La conmemoración del cincuenta
aniversario de la fundación de la Organización para la
Unidad de Africa, en el denominado Día Mundial de este
continente, ha trasladado al Centro de Estancia Temporal de
Inmigrantes las más puras esencias de una serie de personas
que tienen su representación en el CETI y que han llegado a
nuestro país en busca de un mundo mejor, arriesgando su vida
en un viaje tortuoso y arriesgado. Un colectivo que ayer
hizo alarde de su colorido con una muestra variopinta de
costumbres.
Los peinados, las danzas étnicas, los bailes, la artesanía,
los talleres de poesía y sus sentimientos, nos transportaron
a sus orígenes para darnos cuenta de cómo muestran en este
mundo desarrollado en el que quieren labrar su futuro, la
riqueza de sus ancestros en una jornada de convivencia en la
que compartían sus características más singulares con esta
muestra reducida de valores que nos situó “más cerca de
Africa”, como rezaba el título del documental y nos mostró
un continente que evoluciona al 4%, como destacó el delegado
del Gobierno, mientras el primer mundo se encuentra en
recesión económica.
El mundo de colores de lo que se conoce como “Africa negra”,
ha sido un mosaico de actividades que tenían por objetivo
ser un referente de una cultura distinta a la nuestra. Desde
Ceuta, en el CETI, ayer tuvimos ocasión de compartir una
experiencia que contó con el respaldo de las autoridades y
el reconocimiento de todos los asistentes para conocer mejor
un mundo diferente, cargado de posibilidades y que busca
consolidar los valores de paz duradera y de respeto a los
derechos humanos. Objetivos que marcan su tránsito a la
evolución hacia el mundo desarrollado al que aspiran.
|
OPINIÓN / EDITORIAL
