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El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio
Wert, respondió ayer ante los senadores sobre la Lomce en la
que la mayoría de los Grupos Parlamentarios han recordado la
“absoluta soledad” con la que cuenta la reforma educativa
que solo ha sido refrendada por el Partido Popular.
Wert ha reiterado que “si 1.031 padres acuden a la Justicia
para reclamar el castellano como lengua vehicular en vez del
catalán, nosotros se lo tenemos que ofrecer”. Porque, según
el ministro, se trata de “un problema de libertades” que no
debe atender a la “cantidad” de personas que lo soliciten.
También ha asegurado que incorporará al proyecto de Ley
Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) cualquier
fórmula que proponga la Generalitat de Catalunya en relación
al modelo lingüístico que respete el derecho de los padres a
elegir la escolarización vehicular en castellano.
A preguntas del senador de CiU Ramón Alturo Joan, Wert
afirmó que “si la Administración educativa catalana, es
decir, la Generalitat de Catalunya, es capaz de ofrecer una
fórmula que garantice esa libertad, el Gobierno y los grupos
parlamentarios incoroprarán esa fórmula en la medida en que
consiga ese objetivo” en el texto de la LOMCE.
Alturo, que ha tachado la norma de “involucionista y
regresiva”, ha acusado al Gobierno de tener “una obsesión
con la lengua catalana” y de estar “haciendo lo posible por
reducir su uso tanto geográfica como socialmente”. “Nos
recuerda a otra etapa de la Historia que creíamos ya
superada”, ha señalado, para incidir en que “nunca ha habido
ni hay ningún conflicto” con el actual sistema de inmersión
lingüística y Wert lo está creando, lo que a su juicio es
una “irresponsabilidad”.
En respuesta, el ministro puso el acento en que la LOMCE “no
es una norma contra el sistema de inmersión lingüística” y
recordó que incluso “determinada organización” ha acusado al
Gobierno de estar “legitimándola” con la LOMCE. “Lo único
que hace (la ley) es establecer un mecanismo de garantía
para algo que nos ha pedido el Tribunal Constitucional que
garanticemos”, ha señalado, en relación al citado derecho de
los padres a elegir la educación para sus hijos.
Wert dijo al senador que es “legítimo preocuparse y más en
un partido de su significación ideológica, por la lengua
cooficial propia” y le ha recordado que Catalunya es la
única con esta condición que ha optado por “un camino
exclusivo”, que sin embargo, no le ha reportado excelentes
resultados académicos.
“No voy a poner en cuestión que el sistema haya sido
inclusivo o haya servido para inclusión social, pero no
deben estar muy satisfechos del rendimiento del sistema”,
señaló, para incidir en que su nivel de abandono y fracaso
escolar “no es precisamente para estar orgulloso”.
Wert: “Es absurdo acabar con la concertada”
Wert también se ha referido a la educación concertada, la
cual ve necesaria porque “provee de educación a cerca de una
tercera parte de los estudiantes”. El ministro de Educación
aseguró que “si estamos en condiciones de prescindir de la
educación concertada, un sistema que está funcionando y que
provee de formación a cerca de una tercera parte de los
estudiantes, estaré encantado de conocer su justificación”.
Wert respondía así al senador socialista Francisco José
Álvarez de la Chica, quien se ha interesado por la
modificación prevista en el artículo de la legislación
vigente que recoge la obligación de las administraciones
públicas de proveer “plazas públicas suficientes” en los
centros escolares.
La Lomce elimina el término “públicas” en este precepto, lo
que lleva al senador a pensar que el Ejecutivo ha hecho
“desaparecer la preminencia legal de la enseñanza pública
sobre la concertada”. Wert, por contra, explica la
modificación diciendo que no conviene hacer una proclamación
que “por sí misma implicaría que todas las plazas
concertadas sobrarían”.
“La razón de su pregunta no esta sustanciada en el texto de
la LOMCE. No rompemos la prevalencia de la educación
pública. Consideramos toda la educación de carácter
obligatorio y gratuito que sea de calidad,
independientemente del centro”, contestó, para incidir en
que ambos funcionan con fondos públicos y ambos deben estar
enfocados a la calidad. “Eso es lo verdaderamente
importante”, ha añadido.
Posteriormente, fue preguntado por la diputada socialista
María Isabel Flores sobre la educación diferenciada y el
hecho de que mientras el Tribunal Supremo ha sentenciado que
no debe acceder a fondos públicos, la LOMCE blinda su acceso
en condiciones de igualdad con el resto de los centros
educativos.
Para Wert, teniendo en cuenta que suponen “el 0,65 por
ciento de los centros y menos del uno por ciento de los
alumnos” y que la UNESCO en la convención ratificada por
España en 1969 no considera que se trate de un modelo
discriminatorio, “parece más sensato contemplar esta opción
minoritaria de libertad” dentro de la norma.
“Es más que evidente que hay un predominio abrumador porque
así lo quiere la gente, de la coeducación, y, en ese
sentido, es una opción minoritaria”, señaló el ministro,
para incidir en que “siempre y cuando no perjudique las
oportunidades de chicos y chicas, tiene que considerarse una
alternativa más”.
En su opinión, “no existe ningún problema” mientras se
respeten estos principios y “todo lo demás, es crear un
problema donde no existe”. Con todo, ha reconocido que “es
una opción pedagógica que puede estar basada en cualquier
tipo de criterios y que puede ser conforme o no al bloque de
constitucionalidad”, por lo que entiende que “se pueda
entablar una discusión” en ese sentido.
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