PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
  

 

 

OPINIÓN - MARTES, 7 DE MAYO DE 2013

 
OPINIÓN / ANÁLISIS

Vivas, arrastrado por la verdad

Por Alejandro S.


Cuando la palabra de los políticos pierde valor, la democracia sufre daños. En esa situación puede encontrarse el Gobierno de Vivas tras las maniobras de los últimos días para justificar el pago de indebido a Urbaser por 12’5 millones de euros. Haber intentado disfrazar la verdad deja maltrecha la credibilidad del partido gobernante y de su presidente.

Ayer no le quedó más remedio a Vivas que ratificar cuanto se ha venido contado desde estas páginas, pese a que el Gobierno ha dado vueltas y revueltas, jugando con el lenguaje y teniendo muy a gala exponer su sentido de la honradez y la decencia. El presidente reconoció ayer públicamente punto por punto toda la información que ha publicado este medio y que ha denunciado el PSOE: el brillante informe del técnico de Gestión Contable, los descuadres contables, los pagos indebidos por importe de 12,5 millones de euros en concepto de amortización, etc. En el sumum de sus planteamientos, llegó a realizar un juego de palabras, él sabrá con qué intención, que dejó a todos estupefactos: “Se ha pagado lo que correspondía pero ello no significa que todo lo que se ha pagado correspondía”.

La realidad es que por miedo a ser arrastrados por la verdad, el PP y Vivas quieren ahora aparecer como sus valedores. Llegan tarde. Los trabalenguas, los juegos de palabras, los argumentos propios de charlatanes de feria, ahora no valen. Y no valen, porque se han pasado el tiempo, desde que destapamos este asunto, tratando de liar la madeja y procurando junto a todos sus “pelotas”, desacreditarnos e insultar a José Antonio Carracao de todas las formas posibles.

Y con todo este desaguisado, Vivas aún se permite decir: “Somos personas decentes”. Pretende librarse de las responsabilidades políticas -y de las posibles penales- difundiendo el mensaje de que el caso Urbaser se está investigando gracias a sus denuncias. La falacia es absoluta y tan desmentida por los hechos que los populares sólo consiguen que el foco se ponga con más intensidad aún en su entramado económico.

De momento, y hasta que la Justicia de pronuncie, lo que sí ha quedado evidentemente claro, es que son muy malos gestores, que no han defendido con celo los intereses de los ceutíes, que han pagado indebidamente y que no se han preocupado, en su momento, por la renovación de la flota de camiones que pagaban como amortización cuando ya estaban más que amortizados.

Vivas tendría que saber que los políticos no deberían mentir ni aunque fuera por graves razones de Estado, aunque en este caso ni siquiera estaba en juego un asunto de esa naturaleza.

No hace falta ser un fanático de la verdad para comprender que las explicaciones ofrecidas resultan chuscas, políticamente inaceptables, y que la situación del Gobierno de Vivas es ahora más comprometida que antes de regatear a la verdad.

¿Y ahora qué? ¿Cómo se come esto? Pues aquí tienen todas nuestras portadas, toda la verdad, toda la información que no hemos variado ni un ápice. La fuerza de una realidad que han querido ocultar y desmentir por activa y por pasiva.

El Gobierno debería preocuparse de presentar el patio trasero del partido lo más ordenado y limpio posible, en vez de enzarzarse en espectáculos de dudosa utilidad para lo que importa, que es exigir responsabilidades y plantearse reglas transparentes y controles capaces de cortar unas conductas que arruinan la confianza en la clase política. Lejos de eso, la sospecha de corrupción lo deforma todo.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto