Los vecinos de la zona de Fuente Caballo han denunciado
el robo de parte del material urbano del paseo marítimo.
Desde hace meses, los ladrones aprovechan el cobijo de la
noche para ir desvalijando la zona. Gran parte de las
barandillas ya han desaparecido para acabar, probablemente,
en el país vecino. Estos robos de equipamiento urbano se
unen a los que se producen de forma continúa en toda la
ciudad.
Los vecinos de Fuente Caballo han denunciado los continuos
robos de equipamiento urbano que se están sucediendo en el
paseo de la playa. La barandilla instalada por la Ciudad
Autónoma está siendo desvalijada poco a poco. Los cacos
aprovechan las noches para ir desmontando la estructura.
Primero quitan los tornillos y luego se van llevando las
diversas partes de la barandilla.
Los vecinos de la zona que acuden a pasear o con los niños
han denunciado estos robos que pasan desapercibidos, pero
que para los usuarios de la playa están poniendo en riesgo
la seguridad de los más pequeños. Y es que, sin barandillas
nada separa el paseo de la playa, y la zona es frecuentada
por familias.
Estos robos se unen a los que se producen en otras zonas de
la ciudad en las que el equipamiento urbano va
desapareciendo poco a poco. En 2012, la Administración se
gastó más de 100.000 euros para reponer este material que en
la mayoría de los casos acaba en el país vecino donde se han
encontrado bolardos y alcantarillas de la Ciudad Autónoma.
Los ladrones acaparan todo tipo de materiales, desde hierro
hasta aluminio o acero inoxidable. Nada escapa a los
‘cazadores’ de material, que luego revenden o reutilizan lo
que roban en Marruecos.
La empresa privada también ha sido objetivo de los ladrones
que entran a las obras para llevarse materiales, puntales o
maquinaria. Desde el sector de la construcción ya han
alertado de la situación y solicitado más vigilancia en la
frontera para evitar que este tipo de materiales, de grandes
dimensiones, pasen al otro lado. Sin embargo, la situación
no ha mejorado en los últimos meses, en los que incluso han
aumentado el número de robos. Por su parte, los vecinos de
Fuente Caballo esperan que se repongan las barandillas y que
no continúe el desmantelamiento de esta zona en la que la
protección es fundamental.
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