Parece mentira y pocos somos los
que nos hemos percatado de que el pasado miércoles, por
aquello del levante, Ceuta se quedó casi incomunicada,
durante varias horas.
El tiempo en el que nos encontramos no es el más dado a que
esto suceda, pero los temporales llegan cuando llegan y lo
del miércoles, aunque casi pasó desapercibido, afectó a
Ceuta por los cuatro costados.
Uno, si es que ese día no tiene que viajar, únicamente se
entera de esta situación, cuando a eso de las diez y media
de la mañana va a comprar la prensa de ámbito nacional y en
el “kiosko” dicen “Hoy no hay periódico, todavía no ha
llegado ningún barco”.
Ante esto, a uno sí que le queda la posibilidad de leer la
prensa local, bueno, la que se edita aquí, El Pueblo de
Ceuta, que durante muchas horas ese día fue el único
exponente de las noticias, tanto de ámbito nacional, como de
ámbito local, de deportes, sucesos y todos los muchos
acontecimientos que nuestro periódico sacaba en su edición
del miércoles 24 de abril.
Ahora y, precisamente, en esto, viene la razón de querer,
saber y poder invertir en Ceuta, con ayudas o sin ellas,
porque el simple hecho de editarse aquí el periódico implica
dar una serie de puestos de trabajo en Ceuta, que no se
darían si la edición se lleva a cabo en Algeciras, en La
Línea o en Estepona.
De esto, como es natural, también se sabe en esta casa,
porque en los comienzos, como no podía ser de otra forma,
hubo que editarlo fuera, pero muy pronto se vio que se
corría el riesgo, más de un día y más de una semana, de
tener que “tirar” el trabajo de una edición, sin que pudiera
llegar a los “kioskos”el periódico y, por ende, sus
noticias.
El Pueblo de Ceuta, desde hace muchos meses ya, y no lo digo
para que surja el ejemplo, sino porque es así, hizo una
inversión fuerte, midió todos los terrenos y consideró que
lo primero eran sus clientes, sus lectores, y que además eso
llevaba unido el hecho de que “la familia” del Pueblo de
Ceuta fuera mucho más larga, al haber más personas
trabajando en él.
Una vez dicho esto, quedan claras varias cosas, pero muy
especialmente el que, con la que está cayendo, en esto,
también, El Pueblo de Ceuta es capaz de sortear todo tipo de
dificultades, es capaz de aguantar todos los temporales que
le vayan llegando y si no le pueden doblegar las condiciones
atmosféricas, por duras que sean, no parece probable que
otro tipo de “tempestades” le puedan dejar, sin llegar un
día a su puesto de venta.
A partir del mediodía del miércoles, la “tempestad”
meteorológica se fue calmando, el mar o, para ser más a tono
con Ceuta, “la mar” permitió la travesía del estrecho y la
prensa de ámbito nacional pudo llegar, aunque para entonces
“échale un nudo a la cola de una mosca”, El Pueblo de Ceuta
ya se había agotado. Esa es nuestra ventaja, el que sabe dar
primero, da por dos veces.
Ahora, con la primavera ya muy avanzada, no parece lo más
posible que los temporales nos frecuenten mucho, de todas
formas y esto hay que saberlo valorar, por mucho que
madruguen los que se editan fuera, cuando ellos llegan a la
ciudad El Pueblo de Ceuta ya ha recorrido todas nuestras
calles y ya lo ha podido leer media Ceuta.
Alguna ventaja tendríamos que tener, aunque no tengamos la
protección oficial.
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