Cuando en las pasadas elecciones
municipales, el señor Aróstegui consigue un escaño gracias a
los votos del partido de Ali, ya que ni los componentes de
su partido le dieron los votos necesarios para conseguirlo,
algunos se empeñaron en decir “ahora se va a enterar Juan
Vivas y los populares de lo que vale un peine”
Se conoce que Ceuta en una época fue portuguesa ¡pobres
i…lusos!. ¿En verdad se creían que Aróstegui iba a ser el
azote del presidente de la Ciudad Autónoma y de su partido?.
Estos pobres ilusos, que así pensaban, no entienden nada de
nada. Aróstegui jamás sería el azote de Vivas ni de su
partido. Aróstegui sólo atacaría en cosas, que a fin de
cuenta, no perjudicarían al presidente ni a su partido.
¿Digan algo, de alguna de sus intervenciones en los plenos,
en la que haya puesto contra la espada y la pared al
presidente, y éste en su turno de replica, no haya salido
airoso?.
Aróstegui ha conseguido lo que siempre ha venido
persiguiendo un escaño en la Asamblea, dado gracias a los
votos del partido de Alí, un buen político que, gracias a su
socio, ha quedado relegado a un segundo plano. Un segundo
plano que le pasará factura en las próximas elecciones Ya se
lo avisamos. Hoy día hablar de Caballas, es hablar solamente
de Aróstegui, sin tener un recuerdo para Alí.
Usted, señor Aróstegui, al parecer, ha estado obsesionado
con “EL PUEBLO” y con el Ceuta, ambas cosas deberían
desaparecer del mapa, conseguirlo hubiese sido una victoria
sin precedente pero.. Siempre hay, en todas las cosas de la
vida, un pero la cosa no era tan fácil, hasta que ha
sucedido lo que ha sucedido con el pliego de condiciones de
la publicidad institucional, y ahí es donde cree haber
conseguido su ansiada victoria. Nada más lejos de la
realidad.
En este periódico, que nació para defender los intereses de
todos los ceutíes, sin distinción de credos o razas, y en
esa línea seguimos, no hemos utilizado a “ningún tonto
útil”. Carracao ha llevado a cabo lo que debe hacer toda la
oposición, denunciar aquello que crea que no está bien.
Cosa por supuesto, que usted como perteneciente al principal
grupo de la oposición debería haber hecho, porque ello era
su obligación como tal oposición. ¿por qué no lo hizo? ¿por
qué guardo silencio, cuando el deber de la oposición es
sacar a la palestra todo aquello que, supuestamente, haya
hecho mal el partido del gobierno?.
La repuesta a la pregunta es sencilla vio, supuestamente, la
oportunidad de acabar con “EL PUEBLO” y, de esa forma, matar
dos pájaros de un tiro, final del periódico e inyectar al
periódico en el que usted colabora, con la nada despreciable
suma de QUINIENTOS MILLONES de las antiguas pesetas, salidas
del bolsillo de todos los ceutíes.
En estos momentos de crisis por la que estamos atravesando,
donde los impuestos suben y suben, donde nos estamos
apretando tanto el cinturón que algunos llevan pegados en la
lengua hasta colillas caídas al suelo, donde tantos
problemas sociales se dan cada día, me parece, que dar
QUINENTOS MILLONES de las antiguas pesetas en publicidad
institucional a un periódico, algo que no tiene calificativo
alguno. ¿No lo cree usted, señor Aróstegui?.
La justicia tiene la última palabra. Pues, al parecer, hay
indicios de delito.
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