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La Guardia Civil ha detenido a los cuatro presuntos miembros
de una red de tráfico de drogas que introducía hachís en
España desde Marruecos mediante un sistema combinado de
muleros y de coches con dobles fondos, según informa la
Agencia Efe. Tal y como resalta el Instituto Armado, la
investigación se inició hace un año a raíz de la liberación
de una persona de origen camerunés que se encontraba
retenido en un bar de Calamocha (Teruel) por un grupo de
marroquíes a los que adeudaba, presuntamente, el importe de
la venta de un alijo de droga.
La denominada ‘Operación Delfines’ permitió a los
investigadores detectar una red de distribución de hachís y
cocaína al menudeo que operaba en la localidad de Calamocha
y en la comarca del Jiloca bajo la dirección de un ciudadano
marroquí, S.E.A., de 33 años. Los agentes pudieron
determinar que el sospechoso no se limitaba a la venta de
droga al menudeo sino que también organizaba el transporte
de hachís a España y otros países de la UE como Francia y
Holanda.
El cabecilla de la red y su cómplice fueron detenidos en el
garaje de la vivienda del primero, poco después de efectuar
su entrada un vehículo cargado con la droga. Los perros de
detección de narcóticos localizaron en el interior del
turismo 205 bellotas con un peso neto de 2,2 kilogramos.
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