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El desmantelamiento de la gasolinera del Tarajal, que
liberará y supondrá la descontaminación de ese terreno de
dominio público marítimo terrestre, está muy avanzado y los
técnicos responsables estiman que podría acabarse a finales
de este mismo mes. Los trabajos, a cargo de técnicos de BP,
comenzaron en marzo.
El terreno que ocupaba la gasolinera del Tarajal estará
liberado y descontaminado a finales de este mes. Así lo
estiman los técnicos responsables del desmantelamiento de
las instalaciones, a cargo de la empresa distribuidora ‘BP’
(British Petroleum), que las construyó.
Por el momento, ya se ha procedido a la retirada de los
depósitos subterráneos, tras un proceso de limpieza de lodos
y desgasificación llevado a cabo, tal como informó este
diario el pasado 21 de marzo, por la empresa especializada ‘Rafibra’.
A la descontaminación y retirada de los tanques se ha sumado
la desconexión de las tuberías de los surtidores y de los
propios depósitos.
Una vez extraídos de los contenedores, los lodos se
guardaron para transportarlos a la península, donde han de
ser tratados como residuos tóxicos peligrosos, tal como
explicaba con motivo del comienzo de los trabajos el
director de obra y coordinador de seguridad de Ingeniería de
BP, Santiago Hornillo.
En estos momentos, las instalaciones se encuentran ya
prácticamente desmanteladas, y faltarían las labores de
derribo de las estructuras de hormigón que contenían los
depósitos y la explanación de los terrenos.
La gasolinera se cerró el pasado 11 de marzo una vez
finalizado el plazo de la concesión administrativa para la
ocupación del terreno, ubicado dentro de la franja de
dominio público marítimo terrestre. Tras seis años de
pleitos, prevalecieron los preceptos de la Ley de Costas,
que protege esa franja del litoral. En ese tiempo tampoco
prosperó la solicitud realizada por la empresa propietaria,
‘Agrupación Norte’, a las administraciones para que se
proporcionara una ubicación alternativa al negocio, que daba
trabajo a cinco personas.
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