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Después de una semana en el dique
seco, no el autor, pero si las nuevas tecnologías y como que
no me iba a poner a escribir como un movil, que sería como
al deportista veterano meterlo en la ducha fría, o coger
prestado un ordenador para olvidarme de unas letras y
twitearme por facebook.
-Y mira por donde si fueran todos los males por solucionar
de Ceuta, mi tierra, la avanzada del Estrecho, que todo
pasara por un cubo...
-De los dolores eternos, de las angustias internas, y de los
sofoquines, porque como bien dice uno en una pelea de perros
y gatos, nadie sabe, si la persecución fuera por un patio,
una esquina o un rincón olvidado, allá que lo que no hacía
la tira de tiempo, me diera a mi por coger un cubo, y
ponerme en la esquina abandonada de la Estación, a echarle
una agüita al coche.
-Si los desayunos que me presenta mi diario que ya es mayor
de edad, me dice, de los robos de ordenadores en los
colegios, de la quema de coches, de los apedreamientos a los
bomberos, las roturas de los coches nuevos de la Policia
Local, los atracos a las tiendas de comestibles, las
algaradas y tumultos en la frontera, la quema de los
gimnasios de los colegios, y si pareciamos una copia de
Faluya, Beirut, la franja de Gaza, o los Altos Hornos de
Sagunto, en los tiempos del Paco, todo los malos querido
Presidente Juan Vivas, se solucionaran en un pleno,
diciendo, la culpa la tiene Javi Chellarám con el cubo, en
un rincón abandonado de la Estación.
-Aquella tarde, el corazón se me salía por la boca, las
lagrimas, los llantos no me salían, y si pensaba que
cualquier tiempo pasado fue mejor, tampoco es para tanto que
los cuarto de siglo, se rompan en menos de nada, a fin de
cuentas, lo que se rompe, no puede ni alfarero ni chino con
bunitex, que lo pueda pegar...
-Y como el repertorio de ejercicios, pesas, actividades, las
tenias repletas, me cogi una garrafita de agua en una
gasolinera, y en el asfalto destrozado, a la vera de Endesa,
donde se olvidaron los politicos de echarle un poquito de
cemento, alquitran o cualquier tecnología de fomento, me
puse en un rincón con el cubito, un poquito de jabón y un
trapito arrugado, a curarme mis angustias y mis penas,
viendo como chorreaba el agua, y se llevaba tantos malos
momentos que pudiera olvidar en algun contenedor del olvido,
y allá que apareció un coche de la Policia Local, y me dije,
Javier... te van a llamar la atención, eres un blanco fácil,
eres el muchacho alto con gafas, que ya peina canas, ahi la
mar de tranquilo, sacudiendo las cagadas de pavanas y
palomas, y las meadas arrinconadas de los chuchos de las
plazoletas por doquier.
-El zeta, dió lo menos tres vueltas a la zona, y me dije,
Javier, preparate para el paredón... que no hay mas
situaciones de noche en el barrio, no hay mas trompos y
derrapes, ni porritos que liar, ni musica a tope, ni las
mañanas amanecen los botellones, vaciados de esperma a la
luz de la luna, hasta que me dijeron la frase : ¡ caballero
! vayase a un lavadero... eso está prohibido, y sólo pude
pedir la ayuda solidaria, de decirle, hoy ni siento ni
padezco, solo ahogo mis penas, en un cubo con un trapo, y
ahi que esperaron, a otra vuelta a ver como me marchaba, y
cuando fui a coger un periodico para secar los cristales, vi
las paginas de sucesos, y volvi a decir, maldita sea, si por
tres vueltas seguidas por cada esquina, fuera los sucesos
elevados al cubo.
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OPINIÓN / ESCRITOS CABALLAS
