Es, de momento, el “monumento” o
“pseudomonumento” con el que parecen soñar ciertos estratos
políticos y que, desde hace tiempo, nos viene molestando,
más de la cuenta, en el Hotel Parador la Muralla.
Y es que, por muchas vueltas que uno le dé, no se explica
como en el pasillo de un hotel se puede meter una cuadrilla
de albañiles y tirando de pico, de pala, de piqueta y de
todo lo que creen necesitar, y a los inquilinos, o a parte
de ellos, les vienen molestando, hasta límites
insospechados, desde la mañana a la tarde.
Y la cosa no viene, sólo, de ahora. La Puerta Califal puede
ser la excusa para meterse dentro de una parte del hotel,
donde excavan, arañan a su manera las bóvedas y van llenando
de humedad una zona que pasa de ser lo más atractivo del
Parador Hotel La Muralla a la parte que, poco a poco, se va
deshabitando.
Y es que conozco esta casa, tan bien como el que mejor, y
mejor que la mayoría de los que viven en ella, y he visto
como se “ha trabajado”, o se “ha destrizado” la parte alta
de la muralla y ha creado más problemas de los que nadie
podía imaginar.
Ahora mal, a partir de ahora lo único que deseo es que no
vayamos a peor, y eso puede llegar si el “jefe de la obra” o
el que dirige tal obra no vuelve a “meter la pata” como
debió meterla el que dirigió las obras en la parte alta de
la muralla, hace ya varios años.
Y, a partir de ahora, las cosas pueden hacerse mucho más
incómodas, con sólo que desde el organismo político
correspondiente no se coloque como guía, para ver este
“monumento” o “pseudomonumento”, a algún enchufadete que
considere que para verlo mejor hay que entrar desde el
propio hotel.
¡¡No faltaría más!! Y lo más extraño de todo es que desde la
red de Paradores no hayan puesto freno a estas obras que
nada están aportando y que sí nos están ocasionando muchas
molestias.
Una vez más, y esto se repite en muchas ocasiones y con
muchas obras, el capricho de algún politiquillo se ha
impuesto, con la restauración o el descubrimiento de algo
que nada va a aportar a Ceuta y que además de estar costando
un dineral, está dando mil problemas a algún cliente del
Parador Hotel La Muralla.
De todas formas, Ceuta es Ceuta y el tratar de encontrar
algo atractivo no se para en los perjuicios que puede estar
causando a los verdaderos dueños de la casa.
Hace un rato, por aquello de vivir en las inmediaciones de
la Puerta Califal, o lo que quiere ser tal, yo pasaba por
las inmediaciones de la obra y parece que la cosa va
entrando en su justa situación, pero mucho me temo que,
hasta que se llegue al final, todavía tendremos que aguantar
unas molestias que no hemos buscado y que alguien nos ha
traído a nuestra propia casa.
El egoísmo y el desconocimiento de lo que es la convivencia,
los últimos años, nos ha hecho tener que vivir para esta
casa una circulación contra corriente, para que no molestara
al Ayuntamiento y ahora nos trae esto otro.
La pregunta que debemos hacer es ¿A quién estorba tanto el
Parador Hotel La Muralla, en Ceuta?.
A ver si alguien se digna en dar una respuesta clara y
convincente a esta pregunta que estamos haciendo, aunque
mucho me temo que a la hora de dar la cara no son muchos los
que quieren, saben o pueden, especialmente si se trata de
políticos.
|