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El paso fronterizo del Biutz, reservado para los
porteadores marroquíes, registra desde hace unos días largas
colas. Los marroquíes van cargados de bultos de gran tamaño,
que sobrepasan de nuevo las limitaciones establecidas por
las autoridades con el fin de dar más fluidez al tránsito
por los angostos molinetes. La Policía Nacional considera
“normal” la situación, que está controlada por los agentes
de la UIP.
El paso fronterizo del Biutz, habilitado hace unos años en
la zona de los Polígonos del Tarajal para el uso exclusivo
de porteadores con mercancía adosada a sus cuerpos, presenta
estos días largas colas. Los marroquíes van cargados de
nuevo con bultos de grandes dimensiones, a pesar de las
limitaciones establecidas en algunos momentos por las
autoridades españolas con el fin de facilitar un tránsito
fluido por los estrechos molinetes que conforman este paso
de peatones.
A pesar de estos atascos, la Policía Nacional, encargada del
control de este paso fronterizo, considera normal la
situación, tal como señalaron ayer fuentes de la Delegación
del Gobierno. Las mismas fuentes descartaron que las obras
que Marruecos lleva a cabo desde mediados de marzo en la
frontera hayan influido en la ralentización del tránsito por
el Biutz.
Distintos grupos de la Unidad de Intervención Policial (UIP)
procedentes de la península y con apoyo puntual de otras de
Ceuta como la UPR (Unidad de Prevención y Reacción), se
encargan de la seguridad ciudadana en el paso fronterizo,
así como de ordenar las colas de porteadores que desembocan
en él.
Por su parte, la Policía Local, con agentes de la Unidad de
Intervención Rápida (UIR) controla los accesos a los
polígonos comerciales.
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