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Los miembros del comité de empresa de la Autoridad
Portuaria de Ceuta, junto a otros trabajadores y los
delegados de personal, iniciaron ayer un encierro de tres
días para exigir un nuevo convenio colectivo, en el marco de
un calendario de movilizaciones que se lleva a cabo en todo
el estado. Los trabajadores mantendrán el encierro durante
las tres jornadas, de manera ininterrumpida. Este colectivo
lleva desde el mes de enero inmerso en un conflicto, con un
calendario de movilizaciones que finalizará el próximo
viernes con este encierro y que incluyó paros parciales y
concentraciones en toda España.
Los integrantes del Comité de Empresa y los delegados de
personal del Puerto de Ceuta iniciaron ayer un encierro de
tres días en reivindicación del convenio, cuyo preacuerdo
firmó el Ministerio de Fomento pero no autoriza el de
Hacienda.
Mientras los representantes de CCOO se encuentran encerrados
en la sede sindical del Puerto, los miembros de UGT se
encuentran concentrados en las oficinas de las Autoridad
Portuarias tal y como así se convocó desde Madrid.
El encierro iniciado ayer se trata de la última
concentración prevista en el calendario de movilizaciones
fijado con el fin de conseguir el desbloqueo del convenio y
cuyo periodo de ultractividad finaliza el próximo día 8 de
julio.
Jesús Barrientos, representante por parte de CCOO, reconocía
que los avances, con el fin de dar una viabilidad a los
acuerdos alcanzados, han sido mínimos en las últimas
semanas.
Entre las propuestas que se están barajando con el fin de
llegar al acuerdo final es darse un plazo más amplio para
poder avanzar en la negociación, algo en la que ambas partes
están de acuerdo aunque discrepan en cuanto a la aplicación
del laudo arbitral existente. Esto ha llevado a Puertos del
Estado a formular una segunda contraoferta la cual
consistiría en otorgar uno o dos años de prórroga y cobrar
los incrementos de productividad a partir de 2014.
A este respecto, Barrientos no veía con malos ojos la
prórroga aunque mostró su negativa al cobro de estos
incrementos de productividad a partir de 2014 al considerar
que “se estaría renunciando a algo que por laudo arbitral,
en la que las dos partes llegamos a un acuerdo, deberíamos
aceptar”, insinuando que “no tiene sentido jugar a las
cartas y dependiendo de quien pierda se acepta o no”.
En cuanto a la nueva reunión que tenga que mantener la mesa,
Barrientos estimaba ayer que casi con toda seguridad se
llevará a finales de la próxima semana y que los resultados
que se obtengan en dicha reunión se deberán celebrar
ejecutivas nacionales con el fin de analizar las propuestas
para aceptarlas o no o bien para confeccionar un nuevo
calendario de movilizaciones que estaría sometido a los
escasos plazos de maniobrabilidad debido a que la
ultractividad del convenio finaliza el 8 de julio y por
consiguiente sería un calendario “perjudicial no sólo para
trabajadores y usuarios sino también para el Estado Español
ya que se estaría hablando de la paralización de los
puertos”, de ahí que llamara a la realización de un
ejercicio de responsabilidad entre todas las partes
implicadas para llevar a buen puerto esta negociación.
Finalmente, Barrientos consideraba que se trata de una
“actitud negativa más puramente política que económica o
negociadora” e insistiía que los trabajadores no están
solicitando un incremento salarial, sino que “en el convenio
colectivo se estableció como modelo hace tres años que parte
de las retribuciones estuvieran basadas en un incremento de
productividad y en unos incrementos de clasificaciones
profesionales de acuerdo con una gestión por competencias”.
Por su parte, José Martín de UGT destacaba ayer que están
pendiente de las últimas informaciones que se puedan
producir desde Madrid a la vez que informaban que habían
recibido un correo electrónico del presidente del Puerto de
Cartagena en el que se confirmaba la prórroga del convenio
hasta 2015 aunque, desde la central sindical se quiere ser
más cautos y esperan poder tener una confirmación oficial en
los próximos días.
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