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Un artículo publicado el pasado viernes por el
Observatorio de Inteligencia, Seguridad y Defensa del CISDE,
destaca que España es uno de los países europeos con más
operaciones policiales realizadas en los últimos años contra
el yihadismo, en su mayor parte, contra células de
reclutamiento con destino a Afganistán, Irak o Siria.
España es uno de los países europeos “con más operaciones
antiterroristas efectuadas en los últimos años”. Desde el
11-M, se han desarrollado más de 30 operaciones policiales
contra células yihadistas asentadas en el país, y en la
mayoría se trata de operaciones “contra células de apoyo
logístico que se dedican a reclutar, adoctrinar y enviar a
radicales a zonas de conflicto como Afganistán, Irak o
Siria”. Así se recoge en el artículo ‘La amenaza yihadista
sobre España’, publicado por el Observatorio de
Inteligencia, Seguridad y Defensa del CISDE, que se presenta
como “el mayor centro especializado en Ciencias de la
seguridad, Defensa y Estudios Estratégicos en lengua
española”. El autor del artículo, Óscar Pérez Ventura,
dirige el curso ‘Aproximación prospectiva del terrorismo
yihadista en España’.
El especialista, señala que Ceuta y Melilla “representan
para el yihadismo global una reivindicación histórica al
considerar a ambas parte de la Umma (comunidad musulmana)”.
Para los yihadistas, “Occidente ha dividido a la comunidad
musulmana de manera deliberada, siendo fragmentada en
distintas naciones de manera artificial para mantener al
Islam dividido y enfrentado entre sí”.
En el caso de Ceuta han trascendido en 2012 los casos de
tres jóvenes reclutados para la lucha en Siria y, tal como
publicaba EL PUEBLO, el pasado viernes, de un cuarto, un
menor desaparecido del que las Fuerzas y Cuerpos de
Seguridad sospechan haya podido tener el mismo destino.
Respecto a la lucha contra este terrorismo, el autor señala
que en términos de peligrosidad “sobresalen las células
vinculadas a organizaciones mayores ya que son capaces de
llevar a cabo acciones terroristas más letales y complejas,
como prueban los atentados de Madrid y Londres, o los
detalles conocidos de los complots desarticulados”. Las
células independientes “han representado hasta ahora un
nivel de riesgo modesto”. En cuanto a los ‘lobos
solitarios’, “la falta de preparación técnica, los
trastornos mentales de algunos de ellos y las limitaciones
inherentes a actuar de manera aislada reducen su eficacia
final”, concluye.
Los datos existentes apuntan, según Pérez Ventura, a “una
tendencia a la baja en las detenciones de yihadistas así
como una reducción del número de incidentes terroristas
desde 2008”. “Aún así esto se podría deber por una mayor
clandestinidad en las actividades yihadistas o cierto
descenso en la presión antiterrorista”, aclara. Esta
tendencia a la baja de las detenciones podría deberse
asimismo al “declive de las grandes organizaciones
terroristas yihadistas a nivel mundial, hecho que por un
lado parece haber intentado enmendar el yihadismo global a
través de figuras como el lobo solitario”.
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El terrorismo yihadista, el más “peligroso” tras el declive
de ETA
En el artículo del CISDE se señala
que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado
“consideran actualmente al terrorismo yihadista como el más
peligroso por delante del nacionalista/independentista (tras
lo que parece ser el declive de ETA), el de extrema
izquierda y el de extrema derecha”. “Si bien la prospectiva
general de este fenómeno a nivel nacional se encontraría en
ligero descenso, no hay que bajar la guardia ante la amenaza
constante hacia Occidente y en especial hacia España”,
indica. España constituye “un referente especialmente
cualificado a la hora de ser considerado por el terrorismo
internacional de carácter yihadista”, y aunque no ha sufrido
atentados desde el 11-M, existen “factores internos y
externos que mantienen la amenaza” sobre el país, al que
otorgan “un lugar de referencia en el ideario de la yihad
terrorista”.
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terrorismo
