Dentro de la programación
“Semblanza de la Semana Santa” de la Tertulia Flamenca, como
último acto de la misma, se llevó a cabo por el narrador
Ildefonso Álvarez Felip un Vía Crucis aderezado con saetas
del cantaor local José Escobedo “Niño Amaya”.
Ildefonso Álvarez, con su proverbial maestría y
conocimientos del arte escénico fue desgranando la pasión y
muerte del Señor recorriendo en su Vía Crucis algunas de
aquellas situaciones en que se encontró Jesús cuando iba
camino de la Cruz, desde la 1ª Estación: Caída de Jesús,
hasta la 14ª: Sepultura de Jesús, en cada una de ellas
señalando cómo la Semana Santa “gira en torno a la Cruz,
pero la Cruz no es la meta, ni el punto final de la
historia, la Cruz es solo el instrumento de la pasión, su
parte externa y mas escalofriante…”
En cada Estación intercalaba el narrador frases de amor para
consolar su soledad y su agonía. Dándonos cuenta de que el
dolor está íntimamente ligado a la práctica salvadora
enseñándonos a sufrir y llorar con esperanza.”Que yo
comprenda, Señor, el valor de la cruz, dame mis pequeñas
cruces, de mis achaques, de mis dolencias, de mi
soledad…¡Dame convertir en ofrenda amorosa, en reparación
por mi vida y en apostolado por mis hermanos, mi cruz de
cada día…!”
La emotiva y singular plática se acompañó de varios cantes
por saeta, interpretados por José Escobedo “Niño Amaya”,
“rezos jondos” que diría el flamenco o modo de oración
practicado por todos los buenos cantaores, siempre con
significado religioso que alude a los hechos de la pasión de
Cristo. Así mismo, en el ejercicio del Vía Crucis, se fue
intercalando música de Semana Santa a la par que, como hemos
dicho, se interpretaban saetas, con la emoción
característica que le da Pepe Escobedo a su arte que
contagió al público asistente, recibiendo al final del acto,
tanto el narrador Ildefonso Álvarez como el cantaor José
Escobedo, numerosos y merecidos aplausos.
El acto y actuantes fue presentado por el pregonero de esta
“Semblanza de la Semana Santa de la Tertulia Flamenca” ,
Manuel Lancha.
(Hemos de hacer notar la ausencia a estas actividades
religiosas de miembros de las diversas Cofradías existentes
en la ciudad quizás, aun cuando no nos consta, faltara la
invitación personal a los mismos por parte de la entidad
flamenca).
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