La Ciudad gastó durante el pasado año más de 100.000
euros en la reposición de equipamiento urbano metálico. Los
robos se han sucedido en “distintas partes” de ceuta desde
que EL PUEBLO denunciara estas prácticas. Los últimos robos
registrados han sido en la zona de Santa Catalina y los
bolardos del paseo de las Palmeras.
La Ciudad gastó durante el pasado año más de 100.000 euros
en la reposición de equipamiento metálico. Así, se han
sucedido los robos de husillos, alcantarillas, barandillas,
tapas de farolas o bolardos en “distintas partes” de Ceuta
desde que EL PUEBLO denunciara esta situación en febrero de
2011.
Los ladrones han sustraído piezas de mobiliario tanto de
hierro como de acero inoxidable o aluminio. Según han
informado fuentes cercanas a la Administración local a este
diario, los ‘cacos’ también se han dedicado en los últimos
meses a llevarse parte de la tela metálica que rodea como
precaución a las pistas polideportivas descubiertas.
Incluso se han sustraído “varios bancos” de alguna de las
barriadas de la ciudad. El último de los “grandes robos” se
ha producido en pleno paseo de las Palmeras, donde una
cincuentena de bolardos ha tenido que reponerse a causa de
estos robos. La Ciudad, a través de la Consejería de Medio
Ambiente, Servicios Comunitarios y Barriadas, ha sido la
encargada de reponer estos bolardos, ya que el mobiliario
urbano entra dentro de sus áreas de competencia. El coste de
un bolardo oscila entre 80 y 200 euros, mientras que, por
ejemplo, el precio de una barandilla de acero inoxidable es
de unos 150 euros.
Pero no sólo la Ciudad se ve afectada por estas
sustracciones, sino que empresas municipales como Acemsa,
deben reponer “casi a diario” husillos y alcantarillas
robadas, como ha sido el caso en la última semana de la zona
del cementerio de Santa Catalina.
Las tapas de las farolas, farolillos o las vallas de
diferentes obras también son blanco de los ladrones. La
mayoría de estos robos de equipamiento urbano metálico se
produce con el objetivo de su traslado a Marruecos.
|