Informes médicos y otros documentos relacionados
con la actividad del centro de salud del Tarajal aparecieron
anteayer desperdigados en torno a unas bolsas de basura en
un descampado de la zona. A falta de un contenedor, las
bolsas se depositan en la acera, y según testigos, los
“rebuscas” son quienes las abren. Los papeles son legibles
porque no han sido destruidos, sino tan sólo, en algunos
casos, rotos por la mitad.
Unas bolsas de basura repletas de informes y otros
documentos y apuntes médicos, información que ha de ser
confidencial, aparecieron anteayer abiertas y a la vista en
un descampado del Tarajal. Otras bolsas idénticas, pero
cerradas, se encontraban a las puertas del centro de salud.
A falta de un contenedor en el que depositar la basura, el
material en desuso se deja en la acera.
Entre los papeles a los que cualquier persona podía tener
acceso se encontraba alguno tan sensible como el informe de
una mujer embarazada con un “problema de seguimiento de
cáncer de cérvix”, en el que figuran el nombre, el teléfono
móvil y los datos de la seguridad social de la paciente
junto al nombre de su médico. También hay ‘Listados de
Agendas’, todos recientes, del mes en curso, con los nombres
completos, fecha de nacimiento y números de historial
clínico de los pacientes.
Según señalaron algunos testigos, este material sensible ha
acabado en esa situación a consecuencia de la presencia en
la zona de algunos “rebuscas”. Los papeles son legibles
porque en muchos casos tan sólo se ha partido por la mitad,
en lugar de desecharlos mediante un aparato destructor de
documentos.
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