El comandante general de Ceuta, Ramón Martín-Ambrosio
Merino, se despidió ayer de la bandera nacional y de la
plaza ceutí en un austero acto que tuvo lugar en el interior
de la sede de la Comandancia y que no contó con la presencia
de las autoridades civiles. Aunque no pronunció discurso
alguno, escribió que la experiencia había sido
“gratificante”.
Como austero podría describirse el acto militar en el que
ayer se despidió de su cargo el hasta ahora comandante
general de Ceuta, Ramón Martín-Ambrosio Merino. O como lo
definieron las fuentes oficiales de la Comandancia General
de Ceuta, “puramente castrense”.
Apenas duró diez minutos y la lluvia lo deslució, pues
obligó a que el acto militar tuviese que trasladarse al
interior de la Comandancia, en la sede central del
acuartelamiento de ‘Foso Almina’. El comandante general no
pronunció el tradicional discurso de despedida, ni se
dirigió de ninguna otra forma a los asistentes. También
declinó hacer declaración alguna a los medios de
comunicación allí presentes. Como despedida, se repartió
entre los medios de comunicación unas breves “palabras
finales de agradecimiento” en las que el comandante
destacaba lo “gratificante” de su experiencia en Ceuta,
“casi dos años, en una ciudad tan abierta y cercana como ha
sido Ceuta”. “No sólo para mí, sino también para mi
familia”, añadía. Precisamente su esposa era una de las
pocas personas civiles que se encontraban entre los
asistentes.
El acto lo presenciaron los banderines y jefes de cada una
de las unidades con presencia en la Comandancia, así como
una representación de personal militar de alto rango,
encabezado por el segundo jefe de la Comandancia, el general
Julio Herrero Isla. Tampoco asistieron ni el presidente de
la Ciudad, Juan Vivas, ni el delegado del Gobierno,
Francisco Antonio González Pérez, ni ninguna otra autoridad
civil. El comandante tiene previsto despedirse hoy del
presidente, a las 12.30 horas, en la Antigua Alcaldía, donde
el general, como es protocolario, firmará en el Libro de Oro
de la Ciudad. El lunes, si la salud del delegado lo permite,
se despedirá de González Pérez.
En las palabras remitidas por el comandante, Martín-Ambrosio
también aseguraba que “las relaciones institucionales y
personales” que ha tenido en Ceuta con los diferentes
organismos, asociaciones y personas de Ceuta, eran algo que
se llevaba “agradablemente” en su memoria. “El calor humano
y español que se respira en esta ciudad será algo que no
pueda olvidar”, continuaba el escrito.
“Por tanto, sólo tengo palabras de agradecimiento para
Ceuta, sus instituciones y su gente y, cómo no, para las
unidades que componen esta Comandancia General y a toda la
gran familia militar de la plaza, hasta siempre”, concluía.
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El general José Manuel Sanz Román, el sustituto
El general de División José Manuel
Sanz Román será, “casi con toda probabilidad y sólo a falta
de la firma del ministro de Defensa”, el nuevo comandante
general de Ceuta, tal como informó este medio en su edición
del pasado domingo. El comandante general disponía de un
máximo de siete años, según se contempla en el
funcionamiento de la carrera militar, para ejercer de
general de Brigada o de División. Sumando el tiempo que ha
permanecido en las dos graduaciones, ya ha estado los siete
años, tal como explican desde la Comandancia.
Está previsto que el nuevo comandante general tome posesión
del cargo en la tercera semana de este mes, y que el acto se
celebre en el acuartelamiento ‘Coronel Galindo’, el
perteneciente al Regimiento de Caballería Acorazado Montesa
Número 3, pues precisamente fue en este Regimiento donde el
general Sanz Román estuvo como coronel jefe al mando en
Ceuta hace unos ocho años. Este general trabaja en estos
momentos en la Dirección de Asistencia al Personal (DIAPER)
del Cuartel General del Ejército de Tierra, en la capital
del país.
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