Desde la Secretaría de Igualdad y el Grupo Parlamentario
Socialista se han realizado varias alegaciones y
aportaciones al III Plan de Igualdad con la idea de
profundizar, no sólo en los puntos débiles, sino en la
estructura del mismo al fin de visualizar un mejor
desarrollo de las áreas que son necesarias trabajar en
políticas de mujer. Como punto de partida hemos solicitado
que se incluyan dos referencias legislativas más, relativas
a la Ley de Salud Sexual y Reproductiva y de Interrupción
Voluntaria del Embarazo y el Real Decreto por el que se
desarrolla parte de la Ley de Conciliación de la Vida
Familiar y Laboral, por considerarlas primordiales a la hora
de hablar de los derechos de las mujeres.
En cuanto a las grandes líneas de intervención del Plan,
hemos creído conveniente matizar la importancia de incluir
la perspectiva de género en cada uno de los proyectos de la
ciudad, considerar imprescindible implementar los estudios y
las medidas hacia las mujeres con algún tipo de
discapacidad, mujeres inmigrantes, población joven y
personas mayores, así como que la violencia de género se
interprete en el sentido amplio y haga referencia a
cualquier acto que atente contra los derechos y la
integridad de la mujer, sin exigir que se circunscriban al
ámbito de la pareja.
Siguiendo con las fases de elaboración y en relación a los
datos que se utilizan para el desarrollo del Plan, desde el
PSOE de Ceuta pretendemos que los datos estén actualizados y
por ello proponemos revisiones periódicas mediante la
elaboración de una base de datos que se adapte a las
distintas realidades, debido a que no podemos basarnos en un
estudio exclusivo del 2004. Asimismo, creemos fundamental
priorizar aquellos objetivos que no se han conseguido en el
Plan anterior para compensar las desigualdades y no volver a
caer en el error de dejar competencias sin ejecutar. Para
facilitar todas estas acciones, proponemos crear una Unidad
y/o un Observatorio de Igualdad para los diagnósticos y los
estudios específicos, que temporalice las acciones y las
medidas del plan mediante una programación mucho más
concreta y una evaluación anual.
Otro aspecto que consideramos importante es el de la
participación. Para ello, hemos querido incluir entre las
alegaciones la existencia de un periodo de exposición
pública, antes de la aprobación definitiva del plan en el
Pleno, para que la ciudadanía pueda hacer aportaciones.
En cuanto al núcleo fundamental del plan, en relación a la
Comisión Transversal de Género encargada de coordinar las
políticas transversales del género, crear grupos de trabajo,
fijar el organigrama de ejecución y estudiar el balance de
cumplimiento del plan, desde el PSOE de Ceuta valoramos la
importancia de que también puedan formar parte de la misma
los partidos políticos con representación en la Asamblea.
Esta comisión tendrá que estar regulada por un Reglamento y
deberá contar con un presupuesto fijo porque “no podemos
permitir que solo se hayan reunido cinco veces desde el 2009
y que no cuente con una partida económica”.
Respecto a los ejes de intervención, hemos querido hacer una
variación tanto del número de ellos como de la denominación,
pasando de seis a doce. De esta manera podemos abarcar
muchos más aspectos de una manera detallada y crear más
subcomisiones de trabajo. Hacemos hincapié en la eliminación
de la denominación “Ética del cuidado” porque se entiende, y
así lo creemos desde la secretaría de igualdad, más acertada
la expresión corresponsabilidad para hacer referencia a las
relaciones igualitarias en el reparto de las tareas y
obligaciones familiares, “ya que consideramos que desde lo
público debe acabarse con la filosofía del cuidado como
carga y responsabilidad de las personas y fomentar su
concepción como derecho que debe obtener una respuesta de la
Administración Pública”. Como concreción, los ejes quedarían
así: Transversalidad de género y ámbito institucional;
Empleo y formación; Educación y sensibilización para el
cambio de valores; Empoderamiento y participación
equilibrada; Corresponsabilidad y conciliación de la vida
familiar, personal y profesional; Atención y prevención de
la violencia de género.; Cultura, actividad física y
deportiva, ocio y tiempo libre.; Atención a la diversidad;
Cooperación al desarrollo; Medios de Comunicación,
Publicidad, Visualización y NNTT; Salud Integral y por
último, Ecofeminismo y Sostenibilidad.
Dentro de estos grandes ejes, y sin poder mencionar todas
las que hemos propuesto, desde el PSOE de Ceuta trabajaremos
para que se incluyan, bien dentro de este mismo plan o a
través de acciones parlamentarias, estas medidas que
consideramos prioritarias: establecer cláusulas de
preferencia en la adjudicación de contratos públicos para
que en los supuestos de empate se prime a las empresas que
tengan implantados planes de igualdad, crear cuotas en los
Consejos de Administración, estimular la creación de una
Consejería de Igualdad o de un Agente de Igualdad dentro de
la composición del Gobierno, realizar estudios de impacto de
género en relación a las políticas puestas en marcha por
esta Administración, especialmente, en relación a la
concesión de ayudas y subvenciones, impulsar la creación de
un Plan de Igualdad en los centros educativos en
colaboración con el MEC, crear un Plan de Conciliación y
Corresponsabilidad, considerar la violencia económica como
una forma de violencia de género, desarrollar un Acuerdo
Marco y un Protocolo de Coordinación entre todas las
instituciones para actuar contra la Violencia de Género,
elaborar un Reglamento para las mujeres víctimas de
Violencia de Género que recojan todas las medidas que
contempla la Ley, sobre todo las referidas a la parte
económica y de acceso a la vivienda, habilitar en el INGESA
un acceso independiente para las mujeres víctimas de
Violencia de Género, colaborar con el Estado para mejorar
los juzgados de Ceuta e incidir en los trastornos de
alimentación.
Por último, hemos hecho algunas consideraciones que
consideramos errores fundamentales de planteamiento. Así,
queremos que se eliminen las referencias que en el texto
vinculan la prostitución y la trata a la inmigración y/o
emigración, incluyendo estos supuestos dentro del Eje
“Atención y prevención de la Violencia de Género”, la
consideración de la monoparentalidad como factor de riesgo y
exclusión social y la afirmación de la existencia de un nexo
causal entre pobreza y violencia de género.
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