El Gobierno quiere emprender un nuevo camino de reformas,
pero en esta ocasión dirigidas a “fomentar el tejido
productivo”. El diputado Francisco Márquez señala como se
dejan atrás medidas dolorosas, para emprender una senda de
crecimiento con resultados a más corto plazo.
Un punto de inflexión. Para el diputado ceutí, Francisco
Márquez, el Debate sobre el Estado de la Nación ha supuesto
el inicio de un nuevo camino de cambios para lograr un
crecimiento económico y la creación de empleo. El popular
recuerda que el presidente Mariano Rajoy definió todas las
medidas anunciadas como “la segunda generación de las
reformas”. ”Han pasado catorce meses de reformas
estructurales profundas, indispensables, necesarias,
dolorosas y algunas de ellas poco agradables, pero que por
su carácter indispensable había que hacer”, reconoce
Márquez. Ahora, el diputado afirma que comienza una segunda
generación de reformas dirigidas “a potenciar el tejido
productivo, a apoyar a las pymes, autónomos y emprendedores
dentro de las limitadas posibilidades que tiene el Estado”.
No obstante, el camino que queda por delante todavía es
complicado y así lo subraya Márquez. “Este año 2013 va a
seguir siendo un año difícil, pero los analistas
internacionales dicen que España terminará el ejercicio en
condiciones de crecer y veremos ese crecimiento en el último
trimestre del año”. De momento, para conseguirlo, el
Gobierno pondrá en marcha medidas como la ampliación de las
líneas del Instituto de Crédito Oficial para aportar a este
programa 22.000 millones este año, también se amplia el Plan
de Pago a Proveedores o se lanzan medidas de apoyo de
contratación a jóvenes.
En contra del programa
Hasta ahora, Márquez reconoce que muchas promesas
electorales no se han cumplido y que, incluso, se ha actuado
en la dirección contraria, pero defiende que se ha dicho en
todo momento por qué. “No había otra. El barco se hundía y
había que sacarlo a flote incluso con medidas que sabíamos
que no son buenas”, manifiesta el diputado para destacar que
era necesario ese ajuste para cumplir con la reducción del
déficit y que no se cortara el crédito a nivel
internacional.
Sobre el cara a cara de Rajoy con el líder de la oposición,
Márquez señala como Alfredo Pérez Rubalcaba se diluyó en un
discurso en el que “no presentó alternativa ni se sabía qué
defendía”. “Se enredó en no sabemos qué, si en defender una
reforma de la constitución, un estado federal, más
intervención del estado, o más dinero público. No hay
oposición”, asegura.
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“Ceuta está implicada en el combate contra la corrupción”
La corrupción centró gran parte
del Debate sobre el Estado de la Nación que se ha
desarrollado durante los últimos dos días en el Congreso de
los Diputados. El presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy,
anunció una batería de medidas para atajar el problema como
la reforma del Código Penal para endurecer las penas, o las
auditorías a los políticos al fin de su mandato. “Era un
tema del que todos esperábamos que hablara y el presidente
fue contundente, no obvió su responsabilidad ni puso paños
calientes”, señala Márquez. El diputado reconoce que la
posibilidad de corrupción “va a estar siempre ahí”, pero
subraya que hay que ponerle límites legales mediante la ley
de transparencia, y normas que regule el funcionamiento de
los partidos, y determinen con claridad el estatus de los
políticos. Desde Ceuta, la situación que vive la política no
es ajena y así lo traslada Márquez. “En la ciudad no ha
surgido este tipo de escándalos, pero eso no quiere decir
que no estemos implicados hasta la médula en el combate
contra la corrupción”.
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