El Juzgado de lo Penal número dos acogió ayer una vista en
la que comparecían cinco miembros de una misma familia.
Todos ellos estaban acusados de delitos de violencia
doméstica y de tenencia ilícita de armas. Sin embargo
ninguno de los implicados quiso declarar cuando se sentaron
en el banquillo de los acusados.
Los hechos por los que se les juzgaban ocurrieron el 29 de
marzo de 2012. Sobre las siete de la mañana la Policía llegó
al domicilio familiar, donde se estaba produciendo la pelea
en la que estaban implicadas cinco personas.
Tenencia ilícita de armas
El Ministerio Fiscal solicitaba para cada imputado un año y
diez meses de prisión por dos delitos de violencia
doméstica, además de dos años de cárcel por tenencia ilícita
de armas. Pero, ante la falta de declaraciones y, por tanto,
de pruebas, el juez absolvió a los acusados.
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