¡¡Huy!!… ¡cómo está el país!
Las noticias sobre escándalos económicos no paran de salir a
troche y moche para regocijo de quienes ‘marujean’ por puro
morbo.
Todo lo concerniente a la Casa Real es un auténtico filón
para la prensa que destina buena parte de sus páginas (o
ventanas en Internet) al cotilleo.
Se nota que estamos en un país donde las ‘marujas’ (por
definición: los ‘marujos’ también cuentan) dominan buena
parte de la información.
Por no hablar de cierta revista de humor que no está
dispuesta a dejar escapar a su protagonista favorito,
evitando que se extingan los ecos de la polémica “caza” en
Botswana.
Mucho se habla de la señora Corinna, aunque me hace gracia
eso de que es amiga del Rey, y su definición como supuesta
pareja sentimental de nuestro Rey, muy campechano él.
A estas alturas tenemos miedo a las palabras. Pero esto es
tema, más bien, de la prensa rosa.
El lío económico en el que el, supuestamente díscolo, yerno
ha metido a la Casa Real parece no tener fin. Otro filón
para seguir llenando páginas y más páginas.
De todo esto, que ya es mucho, sonsaco que alguien
perteneciente a la propia Casa Real va soltando, de vez en
cuando, una botella rellena con mensaje escrito que arroja
al océano de la información donde reinan tiburones-martillos
denominados ‘medios de comunicación’.
No entiendo por qué nadie, de la propia Zarzuela, toma
medidas al respecto. Supuestamente se filtra mucha
información, afirmando muchas cosas, sobre temas, desde hace
mucho tiempo, que pueden ser considerados graves.
Lo malo es que cuando el río suena y nadie se da por
aludido… algo pasa.
Lo malo, también, es que las declaraciones de nuestro Rey,
hace unos meses, sobre que la justicia es igual para todos…
excede en mucho de un intento de apaciguar a los ciudadanos
cuando no la aplica a sí mismo o a su familia.
Parece que hubiera un micrófono abierto, en cierto lugar,
para que suene estridentemente una escandalosa frase, que me
parece de alguien conocido, que dice, literalmente: “¡Estos
gilipollas no se enteran de que puedo hacer lo que me salga
de los güevos!”. Así nos luce.
Creo sinceramente que el fiscal, del caso Nóos, no quiere
mezclar a la infanta Cristina, ni siquiera para que acuda a
declarar, porque como empiece a tirar del hilo… esto sube
‘pa’ arriba.
Algunos creen que son gilipolleces “made in Puerta del Sol”,
pero… tengo mis dudas.
Lo malo de todo esto, aunque el PP juegue con las frases en
intentos de contradecir la evidencia, es que el mundo entero
se está riendo de nosotros: corrupción a todos los niveles;
sobresueldos en sobres de dinero negro; bancos en quiebra y
sus banqueros con sueldos y/o pensiones archimillonarias; ex
presidente de los empresarios en la cárcel y su
vicepresidente, casi; presidentes de Comunidades autónomas
imputados; aeropuertos sin aviones y estaciones del AVE en
páramos desiertos y sin trenes; más paro que en el resto del
mundo; emigraciones masivas; recortes en educación, sanidad,
etc.; suicidios masivos por desahucios… ¿Qué nos diferencia
de un país bananero del Tercer Mundo?
No sé qué me da, cuando el Rey es un bobo, perdón digo
Borbón, y en el PP todos parecen ser delincuentes -¿por qué
dimiten tantos peperos?-, siendo así que el río suena de
manera alarmante. Y cuando suena…
Nuestra Constitución me parece demasiado proteccionista de
las llamadas clases altas cuando declara en uno de sus
artículos que nuestro rey está exento de cualquier
responsabilidad… ¿no es el Jefe del Estado?, así ya vale que
mantengan los micrófonos abiertos.
Su Majestad, le digo que es muy triste leer en la prensa que
el fiscal descarta pedir que alguien de su familia vaya a
declarar. Su habitual discurso navideño, obviamente, debe
cambiar radicalmente, Majestad, no todos sienten la justicia
por igual, hasta que se le caiga la venda.
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