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ACTUALIDAD - MARTES, 19 DE FEBRERO DE 2013


una de las actividades de la escuela. rd.

formación
 

Un paso hacia el trabajo y la superación personal

La mayoría de los alumnos de la Escuela de la Construcción están en riesgo de exclusión social y el centro les ayuda a superar sus problemas para integrarse en la sociedad
 

CEUTA
Virginia Saura

ceuta
@elpueblodeceuta.com

Con 16 años Miguel abandonó los estudios. Tenía claro que no quería seguir con los libros y los dejó atrás. Sin embargo, el trabajo no llegaba. Para él, la Escuela de la Construcción ha supuesto una oportunidad de formación que además le ha permitido trabajar durante seis meses como carpintero. Ahora participa en el curso de especialización de pintor y se muestra contento por haber aprovechado la oportunidad. A su lado, Luis muestra la esperanza de que este curso le sirva para salir del paro. Él ha llegado a la escuela a través de Servicios Sociales. Este padre de familia estaba desempleado y ahora tiene perspectivas de trabajar nada más terminar el curso. “Es muy práctico y estoy aprendiendo mucho”, señala para destacar el buen ambiente que reina en el centro.

Para los alumnos, la Escuela de la Construcción se convierte en la salida a una situación que en muchas ocasiones puede rozar la exclusión social. A veces, algunos usuarios llegan “con problemas que rompen el alma”, reconoce Marisa González, una de las dos educadoras sociales del centro. Ella y su compañera, Isabel Cabrera, trabajan con los alumnos más conflictivos a nivel personal. Se trata cada caso de forma individual e incluso, los más complicados, se derivan a los psicólogos del Polifuncional del Príncipe. “Es un trabajo duro”, señala Marisa que explica como se produce “un cambio radical” a lo largo del curso en los usuarios que llegan con problemas de integración.

“Además de enseñar las materias propias, también les enseñamos matemáticas, lengua... Les educamos y hay gente conflictiva que mejora como persona a lo largo del curso”, cuenta Francisco Casado, uno de los monitores, que señala como la motivación es uno de los ingredientes fundamentales entre los alumnos. Para él, su trabajo la Escuela de la Construcción es “una experiencia muy positiva y gratificante”. No obstante, lo mejor, y en eso coinciden todos los trabajadores de la Escuela de la Construcción, es cuando un alumno termina los cursos y “vuelve para contar que ha encontrado trabajo”.
 


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