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OPINIÓN - LUNES, 18 DE FEBRERO DE 2013

 
OPINIÓN / EDITORIAL

El camuflaje humano

La presión migratoria en las mil caras que adopta se presenta bajo las más diversas formas y maneras de actuar, en esa lucha y anhelo por buscar un mundo mejor, huyendo de la miseria y a veces, aún a riesgo de encontrar la muerte, emprendiendo una aventura tan suicida en la que también se puede encontrar un fatal desenlace tan imprevisible, como esa desesperada huida utilizando la ocultación más insospechada o inhumana. En el balance de la Guardia Civil referido al pasado año, han sido localizados solo diez inmigrantes ocultos en vehículos pero también se han frustrado 550 intentos. Unas cifras alarmantes fruto de la desesperación por alcanzar la península a cualquier precio.

El “efecto migratorio”, término que, desde el Gobierno de la Ciudad se ha utilizado para reclamar los suficientes fondos como para afrontar esta precaria circunstancia de inmigración ilegal por el denominado también “hecho fronterizo” de nuestra situación geográfica como frontera sur de Europa, es una práctica habitual con mucha mayor incidencia, a tenor de los datos, en la ciudad hermana de Melilla que aquí, donde se ha tenido que utilizar hasta un “detector de latidos” en la frontera para descubrir los camuflajes en maleteros u otras ocultaciones en distintos habitáculos de los coches.

Una situación, como decíamos, con múltiples aristas y enfoques. Una nueva dinámica que requiere, por mor de esas múltiples aristas a las que nos referimos, en materia de inmigración, que 18 organizaciones de todo el país se hayan unido bajo el lema “Salvemos la hospitalidad”, para denunciar un cambio en la ley que, de llevarse a efecto, equipararía actos de “solidaridad” con el lucro de las mafias de la inmigración. Algo aberrante y por lo que las organizaciones que reivindican esta situación, buscan que se rectifique una norma que provocaría no pocos conflictos. Máxime en una España y una Ceuta tradicionalmente solidarias que se verían abocadas a un conflicto de intereses y de identidad de difícil resolución.
 

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