La Federación de Fútbol de Ceuta sigue demostrando semana
tras semana su desprecio por el Ceuta. Y lo hace con una
serie de incongruencias que nada más que ponen de manifiesto
el malestar que parece causarle el hecho de que el primer
equipo de la ciudad esté realizando una destacada actuación
en Tercera División. Actuación, por otra parte, que
impediría que la próxima temporada pudiese competir en
categoría nacional algún otro equipo ceutí más ‘allegado’ al
ente federativo que dirige Antonio García Gaona.
La Federación de Fútbol de Ceuta, lejos de su deber de velar
por el fútbol caballa y mostrar su total predisposición con
los equipos ceutíes, no hace más que poner constantes trabas
al Ceuta, equipo que ya demostró desde el comienzo de la
temporada que lo único que quiere es que se respeten sus
derechos como club.
La ‘penúltima’ de la Federación y de Antonio García Gaona ha
sido ir directamente contra el trabajo y la progresión de la
cantera caballa, sólo por pertenecer al Ceuta. Mientras que
otros clubes con más privilegios y que gozan de la simpatía
de García Gaona pueden entrenar diariamente en el Murube con
un gran número (por no señalar prácticamente todos) de
jugadores pertenecientes a sus equipos filiales, el Ceuta
recibe un comunicado de la Federación en el que se le impide
entrenar con más de cinco.
Un desprecio para todo un primer equipo de la ciudad y para
los jugadores ceutíes que sólo quieren entrenar con el fin
de llegar a formar parte a corto o medio plazo de ese primer
equipo. La lógica, en esta Federación que preside García
Gaona, brilla por su ausencia. Si bien la reparación del
Alfonso Murube se convirtió en el mayor estandarte del ente
federativo para, según él, promocionar el fútbol-base de la
ciudad, ahora es la propia Federación la que impide que esos
mismos jugadores que forman parte de la base puedan aprender
mucho más entrenando con jugadores y técnicos con grandes
conocimientos y experiencia.
La Federación debería aprender de algunos clubes ceutíes
que, buscando este fin, permiten que sus propios jugadores
entrenen con el Ceuta. Y es que, lo que debe primar por
encima de todo, y que ni Antonio Garcia Gaona ni su
Federación quieren ver, es el futuro del fútbol ceutí.
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