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Los actos que está llevando a cabo la Federación de
Fútbol de Ceuta en contra del Ceuta están afectando
directamente a sus jugadores. Unos jugadores, en gran medida
ceutíes o afincados en la ciudad desde hace muchos años, que
no entienden el trato que están recibiendo del ente
federativo por el que son representados. Si en un primer
momento los ataques iban directamente contra la directiva
del club, desde hace unas semanas estos están siendo
redirigidos hacia los jugadores, que están comenzando a
pagar las consecuencias de esta situación.
“No entendemos todo lo que está pasando y por qué los
jugadores tenemos que sufrir las consecuencias de esto,
porque lo único que queremos es entrenar tranquilos y jugar
nuestros partidos sin mayores problemas”, reconocen algunos
de los representantes de toda la plantilla. Uno de los
jugadores, Villatoro, puntualizó que “durante toda la pasada
semana no pudimos utilizar las bañeras de hielo, algo que es
muy importante para mí”. El motivo: que la plantilla fue
acusada de romper un conducto de agua, cuando “es mentira, y
así lo pudimos comprobar”.
Uno de los aspectos más sangrantes de esta situación es el
hecho de que la plantilla ha tenido que ducharse con agua
fría, algo que “jamás había sucedido con anterioridad”. Así,
tras los entrenamientos, los jugadores se repartieron entre
ducharse con agua fría o esperar a llegar a sus casas para
hacerlo con agua caliente. En ambos casos “un riesgo para
todos, porque cualquiera podría haber cogido un resfriado y
ser baja para el próximo partido”, lamentan.
Incluso, en algo tan importante como la recuperación de los
jugadores, la Federación está poniendo impedimentos,
asegurando la plantilla que “cuando tenemos sesión con la
fisioterapeuta, los últimos apenas tienen tiempo de poder
tratarse. Llegan los de la Federación y comienzan a meternos
prisa, y Nuria (la fisio) apenas tiene ni cinco minutos para
tratarnos a algunos, con lo que eso supone para llegar bien
a los partidos”.
En cuanto a los horarios de los entrenamientos, los
jugadores también se quejan por no poder ejercitarse cuando
“mejor nos conviene, que para eso somos el primer equipo”, y
destacan que “si alguno de nosotros llega un poco antes para
calentar o hacer estiramientos no puede, porque se encuentra
la puerta cerrada y tenemos que esperar a que la abran”.
Así, los jugadores de la plantilla declararon que “la Ciudad
se ha equivocado al cederle el Murube a la Federación,
porque por culpa de eso el fútbol ceutí ha dado un paso
atrás”. La plantilla del Ceuta espera que esta situación no
se alargue en el tiempo, puesto que es “muy difícil tener
que trabajar en estas condiciones”. Unas condiciones que
dejan en evidencia el trato de la Federación de Fútbol de
Ceuta con el primer equipo y sus jugadores.
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FÚTBOL / TERCERA DIVISIÓN, GRUPO ‘X’
