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La Guardia Civil investiga si el intento de alcanzar la
península en una embarcacíón por parte de cuatro inmigrantes
detectados ayer en aguas próximas a Benítez responde a un
nuevo método. Los subsaharianos, tres hombres y una mujer,
se desplazaban en una pequeña lancha deportiva con un motor
de 40 CV y no iban con ropa deportiva como es habitual.
La Guardia Civil abrió ayer una investigación para
esclarecer si el caso de una patera con cuatro inmigrantes
interceptada ayer en Benítez responde a un nuevo ‘modus
operandi’. La embarcación fue detectada, según señalaron
fuentes de la Benemérita, en aguas próximas a Benítez hacia
las 10.00 horas por la Patrullera P-112 de la Armada.
Tras el aviso a la Guardia Civil, esta desplazó al Servicio
Marítimo, que localizó la lancha, rígida y dotada de un
motor de 40 CV, con la que los subsaharianos, tres hombres y
una mujer, trataban de llegar a la península. Según agentes
de la Guardia Civil, con el tiempo reinante ayer en el
Estrecho y una barca de esas características sí es posible
realizar la travesía con cierta seguridad.
Llamaba la atención tanto el tipo de embarcación usada, que
es deportiva, como la forma de vestir de los inmigrantes. La
mujer y uno de los hombres iban abrigados con chaquetas de
cuero. Según relató a los agentes uno de ellos, que
aseguraba proceder de Congo, les habían vendado los ojos
antes de subirles a la embarcación.
Con el fin de descartar que hubieran partido de Ceuta, se
dio aviso a guardas de seguridad de la empresa Serramar, que
presta servicio en el Centro de Estancia Temporal de
Inmigrantes (CETI), para ver si podían identificarlos. Al
cierre de esta edición, se investigaba tanto la titularidad
de la lancha como la procedencia de sus ocupantes, aunque
estaba “prácticamente” descartado que fuera el CETI. Los
cuatro inmigrantes fueron entregados en la base de la
Guardia Civil del puerto deportivo al Cuerpo Nacional de
Policía para su filiación.
Otras entradas
Por otra parte, la Guardia Civil informó de la llegada a
Ceuta de otros 10 inmigrantes entre el martes y el
miércoles. Los cuatro primeros fueron detectados a las 4.30
de la madrugada del día 12 cuando se aproximaban al espigón
del Tarajal en una balsa. Los otros seis se localizaron
hacia las 4.00 horas también por la cámara térmica en la
bahía norte, junto al espigón de Benzú. Aunque se activó
tanto al Servicio Marítimo como a Salvamar y una patrullera
marroquí se hizo a la mar, los subsaharianos lograron, sobre
las 4.50 horas, alcanzar tierra en la zona de Punta Blanca,
donde la Guardia Civil los entregó a la Policía Nacional.
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