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Después de pasar tres días en la ciudad, el remolcador SB-406
de la Armada rusa se marcha hoy de la ciudad para retomar su
rumbo. El buque llegó el pasado lunes con el objetivo de
realizar operaciones de avituallamiento y para dar descanso
a sus 60 tripulantes, que durante estos días han paseado y
comprado en las tiendas de la ciudad.
En esta ocasión, no se ha realizado acto protocolario con el
presidente de la Autoridad Portuaria, al tratarse de un
buque de apoyo logístico. Así, el remolcador se ha dedicado
a realizar tareas como la toma de combustible, descarga de
residuos o rellenar sus depósitos de agua potable. Además,
también han cargado sus bodegas.
Este es el cuarto buque de la Armada rusa que visita el
puerto ceutí en menos de un mes. Mientras, durante el pasado
año, llegaron a la ciudad 12 naves de la Armada rusa con
alrededor de 1.200 tripulantes. Una tendencia que parece
consolidarse en el tiempo y que desde la Autoridad Portuaria
esperan conservar. No en balde, su presidente, ha tenido un
trato directo con todos los comandantes de flota que han
llegado a la ciudad y a los que ha recibido personalmente.
Por su parte, los buques de la Armada rusa han portado la
bandera española y ceutí en señal de agradecimiento por el
trato recibido cada vez que han atracado en la ciudad para
descansar y tomar combustible o víveres.
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